Durante la jornada de ayer se viralizaron imágenes de automóviles con patente paraguaya “perdiendo” combustible de sus tanques sobre el puente internacional San Roque González de Santa Cruz, una situación que puso en peligro no sólo a estos actores sino a todos los conductores y personal que trabaja en el lugar, debido a que el material inflamable y el calor abrasador del asfalto no son una buena combinación.
La situación no es nueva, se repite de vez en cuando y creció en el último tiempo con la brecha cambiaria que existe entre ambos países. Esto desencadena que los paraguayos crucen el viaducto hacia Posadas para comprar combustible, pero por las horas de demora para volver a su país, bajo un calor apabullante, hace que sucedan este tipo de casos sobre el viaducto.
“Es una situación que se da de vez en cuando y es como estar trabajando al lado una bomba”, graficó Camilo Acuña, vocal de ATE y trabajador de una casilla de Migraciones sobre el puente Posadas-Encarnación.
En diálogo con la FM 89.3 Santa María de las Misiones, explicó que los casos de derrame de combustible “lo notamos más en la casilla, que es nuestro lugar de trabajo, por el olor o a veces porque directamente se está derramando el combustible al lado nuestro”.
A su vez, contó que varias veces fueron testigos de cuando la Aduana retuvo automóviles con doble tanque o adulterados para contrabandear nafta. “Aduna hace los controles de la parte física del vehículo y a veces si los encuentran. Hay unos cuantos estacionados ahora ahí”, contó.
Acuña expresó la preocupación que tienen como trabajadores y no es nuevo, lo que pasó es que tomó trascendencia nuevamente por el video viralizado de al menos tres autos en las mismas condiciones, derramando nafta en el puente.
“Se han dado más casos, quejas del compañeros que tienen que llamar el supervisor y avisarle que dé aviso a la Gendarmería, a la Aduana, que un auto está poniendo en peligro a toda la situación del control, no solamente al trabajador de Migraciones sino a los demás vehículos y a personas que están transitando por el puente“, describió.
Controles “difíciles de realizar” en el cruce diario
Seguidamente, Acuña fue consultado acerca de si hay un tipo de pena o intervención de Migraciones en los casos donde un ciudadano “x” cruce el puente varias veces al día, como fue el caso de “El Rey del Combustible”, que cruzó la frontera 19 veces en cuarto días y transportó más de 3 mil litros de combustible, con un fin que por ahora son puras especulaciones.
El funcionario explicó que si bien esas cuestiones las maneja Aduana, en lo que respecta a Migraciones “es difícil realizar un control sobre si la persona puede o no hacer varios tránsitos con un determinado motivo, (en este caso) que es la compra del combustible”. Al justificar su respuesta, dijo que “excede a nosotros qué va a hacer después con ese combustible, por qué pasa tantas veces”.
“Se va aggiornando también la legislación de Aduanas seguramente, en cuanto a los materiales que se transportan, de qué manera, por qué con tanta frecuencia”, agregó.
Demoras en el cruce por culpa de los “paseros” de combustible
Seguidamente, el trabajador migratorio explicó que debido a las asimetrías cambiarias, el puente se satura constantemente y se debe a los contrabandistas de combustible, que “tienen un mismo fin que es ir a comprar la nafta a Argentina y a veces le quitan lugar, el espacio a aquellos que tienen otros fines como ir al supermercado, ir a cenar la costanera o almorzar, a pasear por la ciudad, a transitar por la provincia de Misiones y que muchas veces desisten de esa intención que tienen porque se encuentran que el puente tiene cinco o seis horas de fila y son mayormente de aquellos que quieren cargar combustible de manera ‘rara'”, sintetizó.
A su vez, diferenció que “hay muchos encarnacenos que vienen una vez por semana a comprar combustible, otros que vienen cada tanto”, pero “hay otros que tienen unas tránsitos raros, pasan cuatro o cinco veces por día y saturan el puente”, reiteró.
No hay límite en la cantidad de cruces
Acuña contó a la radio de PRIMERA EDICIÓN cómo realizan el registro del tránsito diario sobre el puente.
“El sistema de por sí, solamente nos avisa cuando una persona ha tenido un tránsito muy reciente porque podría tratarse de un error que estamos cometiendo, entonces por las dudas nos avisa y tenemos la posibilidad de ver los últimos tránsitos que ha tenido o de ahondar inclusive en la cantidad de tránsito que ha tenido y ahí es que se nota cuando alguien pasa tres, cuatro, cinco veces”, contó.
Dijo que hay casos específicos, por lo que “si la jefatura o la superioridad nos solicita que cuando encontremos tránsitos muy frecuentes en una persona le demos aviso, eso varía, a veces está la orden y a veces no, depende también de interactuar con otras instituciones”.
“Para la ley de Migraciones no hay límite, por lo menos no hay nada explícito con respecto a la cantidad de tránsitos. Pudieron darse situaciones de personas que nos llaman la atención por su frecuencia y que queramos ahondar en esto y saber qué es lo que hacen Argentina”, contó.
Recordó que “una persona extranjera debe realizar un ingreso y se le otorga la categoría migratoria y esa categoría tiene que ver con los fines que esa persona pretende tener en la Argentina”.
Y ejemplificó que: “Un turista solamente pasea, saca fotos, se hospeda y una persona migrante que va a trabajar debe estar autorizada por la Dirección Nacional de Migraciones; ahora, (el del tránsito vecinal fronterizo) TVF, que es el que carga nafta, no tiene una limitación de tiempo ni resulta sospechoso que se mueva por la frontera porque es para compras o visitas y compras es exactamente lo que está haciendo: va y compra combustible, entonces para la Dirección Nacional de Migraciones no tiene ninguna cosa que nos llame la atención. Eso sí, la cantidad de tránsitos limitan a otras personas”.
Sólo “llaman la atención en cuanto a su motivo, porque no están transportando verduras, están llevando un material explosivo”, añadió.