Debieron pasar más de tres años para que la familia y amigos del destacado deportista Renzo Lion Brizuela Vidal (22) tengan un poco de paz y justicia luego de su muerte, el 29 de agosto de 2020.
Este jueves al mediodía, el jurado unipersonal encabezado por el juez Correccional y de Menores 2, César Raúl Jiménez se expidió y condenó a Agustín Luis Araujo (28) a tres años y seis meses de prisión efectiva y ocho años de inhabilitación para conducir vehículos automotor por ser encontrado penalmente responsable por el delito de “homicidio culposo en accidente de tránsito”, estipulado en el artículo 84 bis del Código Penal Argentino.
A la hora de dar el fallo, el magistrado tuvo en cuenta la pieza clave del caso. Se trata del video de una cámara de seguridad que muestra el momento exacto de la maniobra imprudente de Araujo y el posterior esquive y despiste del joven deportista sobre la calle Juan Pablo II del barrio Fátima.
Los fundamentos serán leídos oportunamente el 14 de septiembre en el mismo recinto judicial.
Pedro Brizuela: “Que quede preso es lo que queremos”
Una mezcla de congoja y dolor se sentía en el ambiente en las afueras del Juzgado Correccional y de Menores 2 de Posadas cuando Pedro Brizuela tomó contacto con PRIMERA EDICIÓN.
“Son tres años y seis meses y la posibilidad de que quede preso, eso es lo que queremos”, expresó el padre del joven, quien también en el pasado fue un reconocido deportista.
Ante la consulta de si tiene alivio tras el fallo, contó que “voy a tener paz cuando vea que este señor esté adentro pagando su condena, yo hasta el día de hoy no tengo paz”.
A su vez, tildó de “mentirosos” a la defensa de Araujo y al propio acusado, porque “bien se ve en el video que el tipo dobló como vino. Son mentirosos porque dicen que la moto (de Renzo) no venía sin luces, y la moto tenía luces (…) La gran capacidad de Renzo fue la intuición, como cuando competía, cuando pudo esquivar esa camioneta, nada más que no tenía en cuenta que estaba esa mampostería aí enfrente, lastimosamente”, resumió.
“Creo que nosotros, las personas de bien, tenemos que esperar que las cosas que se hagan como tiene que ser. Si yo tengo un revólver y apreto el disparador sale un tiro y puedo matar a una persona; y si yo tengo un volante en la mano y apreto el acelerador, sé que puedo matar a una persona, estamos en la misma instancia, ¿cómo yo no voy a cuidar a mi prójimo?”, explicó.