Los focos de incendio que llevan más de dos meses en la provincia causaron un daño inconmensurable para la economía local y nacional. El fuego afectó directamente a las cinco principales cadenas productivas de Corrientes y dio lugar a la mayor tragedia económica de Argentina, cuyas consecuencias se sentirán a corto, mediano y largo plazo.
Tras un relevamiento de impacto en las industrias arrocera, cítrica, yerbatera, forestal y ganadera, los números dan cuenta que, hasta el 22 de febrero, se quemaron 1.000.000 de hectáreas que representan la pérdida de $107.835 millones. De ese total, $82.950 millones corresponden al presente de capital y renta y los otros $28.885 a la infraestructura secundaria de producción y costos.
En arroz, las hectáreas sembradas en la campaña 2021/22 sumaron 96.000 que representan el 45% de la superficie nacional. En ese caso se perdió el 25% de la producción lo que equivale a 220 millones de toneladas menos. En este sentido, el valor por cada tonelada asciende a $24.900 lo que representaría una pérdida de $5.500 millones.
Cabe destacar que el 50% de la campaña se está por cosechar y las pérdidas podrían ser aún mayores. A su vez, especialistas alertan que la próxima campaña será de menor producción producto de la sequía y carencia de agua en el embalse.
Por el lado de los cítricos, de acuerdo a los relevamientos, se perdieron 72.000 toneladas de frutas. El precio por kilo es de $25 lo que representa una pérdida total de $1.800 millones.
Dentro de este sector se perdió también la cosecha de otoño que representa unas 50.000 toneladas de frutas por un total de $300 millones. Además, corresponde sumar la pérdida por calidad, menor precio y menor rinde: $250 millones. Es decir, la pérdida total en la industria cítrica asciende hasta los $2.350 millones.
En la industria forestal, cabe resaltar que la provincia de Corrientes tiene un total de 550.000 hectáreas con bosques implantados, de las cuales el 70% corresponde a pino y el 30% a eucalipto. Esto convierte a la provincia en la primera a nivel nacional en plantación forestal.
Los especialistas consultados por PRIMERA EDICIÓN, advirtieron que hasta el 22 de febrero se quemaron 40.000 hectáreas forestadas. En este sentido, el precio de madera por hectárea asciende a los $500.000, lo que representa un déficit de $20.000 millones.
Pero además, para salir adelante, los productores deberán recomponer la superficie de las implantaciones arrasadas por el fuego. De acuerdo a la cantidad de hectáreas incendiadas, esto representaría un costo de $6.000 millones.
Al mismo tiempo, este sector sufrió la pérdida parcial de unas 20.000 hectáreas. Si el cálculo se hace teniendo en cuenta un 20% de daño, representaría un costo de $100.000 por hectárea, elevando el total a $2.000 millones.
Hay que dar cuenta también que los incendios provocaron daños a la actividad de resinado. Advierten en este sentido que el fuego quemó 2.600.000 plantas, por un costo total de $2.800 millones. Con todos estos factores, la industria forestal acumula una pérdida de $30.800 millones.
Las plantaciones de yerba son otras víctimas de esta tragedia. Corrientes cuenta con una superficie sembrada de 60.000 hectáreas, lo que representa el 30% del total en Argentina. Cabe destacar que a este sector también se vio perjudicado por el calentamiento del suelo, la seca y la temperatura ambiente.
Según los relevamientos, se perdieron 2.600 hectáreas de plantación y los especialistas advierten que los costos para la recomposición de la superficie ascienden a los $1.100 millones. A su vez, el costo para reimplantar en la tierra arrasada es de $900 millones.
Al mismo tiempo, los productores estiman que la pérdida es de 76 millones de kilos de hoja verde. Tomando como referencia un precio de $50 por kilo, el daño asciende a los 3.200 millones. Con los diferentes ítems, la industria yerbatera afronta un déficit total por $5.200 millones.
Por último, uno de los sectores más golpeados fue la industria ganadera. Corrientes tiene 4.700.000 cabezas de ganado, es el cuarto productor del país y posee el 8,5% del rodeo nacional.
Desde el sector informaron que hasta el 22 de febrero se murieron 155.000 animales aproximadamente. Esto representa costo de $12.100 millones.
Pero, esto no es todo ya que también se perdieron kilos de carne por teneros no nacidos y novillos bajos de peso producto del mal engorde. La pérdida en este aspecto se traduce en $12.700 millones.
Este sector también registró un fuerte golpe por los daños en la infraestructura. Sobre el 1.000.000 de hectáreas quemadas, se perdieron 10.000.000 de metros de alambre, a un costo de $800 por metro, lo que representa un costo de $8.000 millones.
A ese panorama se le debe sumar los daños en la infraestructura básica ganadera, es decir: corrales, molinos, tranqueras, etc., por un total de $2.800 millones. Los productores también señalan que las pérdidas registradas actualmente traerán inevitablemente nuevas pérdidas en las zafras subsiguientes.
Entonces, analizando la pérdida ganadera dentro del subsegmento inmediato, se destaca que, al 22 de febrero, había entre 150.000 y 200.000 animales sujetos a traslado por carencia de alimentos. En este contexto, el costo de alquileres de campos y traslado asciende a $3.500 millones. En todo este contexto, los daños en la industria ganadera representan $39.100 millones.
El resumen de lo expuesto hace que las pérdidas consolidadas de las cinco industrias básicas de la provincia conformen un valor de $107.835 millones en manos del sector privado. Sabiendo que existen otros sectores damnificados que están por fuera de los mencionados, el daño total de la tragedia será aún mayor.