Este jueves se realiza la autopsia a Gladis Gómez (39), la comerciante obereña asesinada de un tiro en la cabeza por motochorros.
Según pudo averiguar este Diario, el examen médico legista no se concretó en la fecha prevista debido a que desde el hospital SAMIC Oberá remitieron por error la historia clínica de la víctima a la sede del juzgado que instruye la causa y no al Cuerpo Médico Forense del Poder Judicial, lo que generó el atraso en la medida. Todo esto afectó a la familia de Gladis Gómez, que sigue aguardando que se completen los trámites legales de rigor para poder darle el último adiós en la Parroquia Cristo Rey de Oberá y luego la inhumación en el cementerio La Piedad de esa misma localidad.
En cuanto al avance de la investigación, se supo que la audiencia indagatoria prevista para notificar a uno de los detenidos por el delito de “homicidio en ocasión de robo” se postergó debido a una tragedia que afectó al juez de Instrucción de San Ignacio (subrogante en Oberá) y que sigue el caso, Pedro Benito Piriz, quien perdió a su madre en un siniestro vial ocurrido en Villa Olivari, en cercanías a la localidad correntina de Ituzaingó.
La víctima fue atacada el miércoles 2 de marzo último en el comercio que atendía sobre la calle Piedrabuena de Oberá. Fue alrededor de las 21 cuando irrumpió un ladrón y le exigió que le entregara dinero. Cuando le respondió que no tenía nada para entregarle el hombre le efectuó un disparo que le impactó arriba de la ceja derecha.
El malviviente escapó junto a un cómplice que lo aguardaba en una motocicleta. Gladis alcanzó a pedir ayuda. Cuando llegó la policía estaba consciente y les relató lo que había sucedido.Fue llevada de urgencia al Hospital SAMIC donde permaneció en la sala de cuidados críticos hasta el domingo, cuando se produjo su muerte.
Una semana después del hecho la policía detuvo a “Marito” (28), sindicado como el autor del disparo. Fue en el barrio Caballeriza. Allí secuestraron prendas de vestir, dos teléfonos celulares y un proyectil similar al de calibre 32 deformado que quedó en la escena del hecho.
Luego de rastrearlo por varios días entre los barrios Caballeriza y Sixten Vick , investigadores de la UR-II aprehendieron a un segundo sospechoso, conocido como “El Chueco” (27) cuando se desplazaba en una motocicleta a la que le habría cambiado de color, luego de saber que estaban tras el conductor de la moto que quedó registrada en cámaras de seguridad. En primera instancia fue trasladado al Juzgado de Instrucción 1 de Oberá y para su indagatoria “El Chueco”, quien se abstuvo de declarar y fue imputado por el juez Piriz por el delito de “homicidio en ocasión de robo”.
“Marito” en tanto, debido a que fue indagado antes del fallecimiento de Gómez, aún se encuentra notificado por el delito de “robo en grado de tentativa y lesiones gravísimas”.
Es por ello que en los próximos días nuevamente será llevado a sede judicial para una ampliación de indagatoria, donde se le informará del cambio en la acusación. El caso causó conmoción en gran parte de la sociedad misionera y en la ciudad de Oberá se hizo una marcha en pedido de Justicia.