Desde hace 24 días los vecinos de Puerto Piray son rehenes de una decisión inconsulta y autoritaria del Ejecutivo municipal, a cargo de Mirtha Lezcano. Es que el colectivo interurbano, que hace 60 años hace el mismo recorrido entre Montecarlo, Piray y Eldorado, hoy lo tiene en parte prohibido.
La unidad de la empresa Kruse no puede ingresar al casco urbano de Piray desde el 28 de agosto cuando una de línea fue retenida por inspectores municipales, en la ruta 12 durante la noche, dejando varados a estudiantes, trabajadores y adultos mayores, a seis kilómetros de sus casas.
Los ánimos se caldearon aún más luego del sucuerto deuna unidad de Kruse que ingresó hasta el ejido urbano la semana pasada, y que hoy sigue retenida por personal municipal en la terminal de ómnibus nueva de esta ciudad (en el kilómetro 6), a pesar de que la empresa inició acciones legales contra la Municipalidad de Puerto Piray.
Por todo lo relatado, los vecinos autoconvocados se pusieron en plan de lucha constante y siguen reclamando el regreso del colectivo interurbano a la ciudad. Permanecen acampanando frente al edificio municipal, en el centro de Piray y presentaron un proyecto de ordenanza al respecto.
Verónica Centurión, vecina de esta localidad contó que “el conflicto no está solucionado, los vecinos permanecen autoconvocados en la plaza 9 de Julio frente al municipio, en lucha constante”.
En diálogo con la FM 89.3 Santa María de las Misiones, la comunicadora aseguró que “van a permanecer de acampe hasta que el Honorable Concejo Deliberante trate el proyecto de ordenanza presentado”.
Los vecinos y usuarios quieren respuestas concretas de la Comuna, ya que no hubo comunicación oficial sobre la decisión. “No nos están dando motivos del por qué una empresa (Kenia) que hace siete años está aquí puede tener tanto poder sobre el Ejecutivo municipal, cuando la empresa Kruse hace 60 años hace el servicio a nuestra comunidad”, criticó la vecina.
Y “no podemos entender que, si existe una ley de libre comercio, no puedan funcionar las dos unidades, porque este conflicto es por el servicio interurbano, no por el servicio urbano”, recalcó. “Hasta el día de la fecha el servicio interurbano ha sido para nosotros de vital importancia y sigue siéndolo por eso esta lucha de los vecinos”, añadió Centurión.
El proyecto de ordenanza
Los vecinos, cansados del ninguneo de las autoridades municipales, presentaron un proyecto de ordenanza de 28 fojas y firmas donde sustentan el reclamo.
En el escrito, diferencian el servicio urbano (concesionado por la empresa Kenia del Grupo Horianski), del servicio interurbano que presta la empresa Kruse, y que une a Montecarlo, Piray y Eldorado. Además subrayan la prohibición arbitraria que impuso el Municipio y que carece de sustento legal, ya que Kruse no tiene infracciones (multas) y no se le puede prohibir que circule.
El proyecto iba a ser tratado ayer en el Concejo Deliberante local pero, por una convocatoria del Ejecutivo municipal a todos sus trabajadores en dicho recinto, la sesión debió ser suspendida. El escrito presentado será tratado este jueves a las 17.30 en reunión de comisión.
Actitudes patoteriles
Además, Centurión dio a conocer a la radio de PRIMERA EDICIÓN la manera en que se maneja el Ejecutivo municipal, a través de situaciones autoritarias y amedrentadoras contra los vecinos.
“Ayer, mientras se iba a llevar a cabo la sesión del Concejo Deliberante local, los vecinos se acercaron para presentar el proyecto de ordenanza. Sin embargo se encontraron con que, una hora antes de la sesión, el recinto estaba lleno de empleados municipales citados en ese lugar. Acá nos conocemos todos porque es un pueblo muy chiquito y sorprendió ver a todos los municipales contratados en el recinto, un lugar donde caben unas 10 personas pero había más de 40″, contó.
Debido a esto, “los vecinos no pudieron ingresar para ver que se trate el proyecto”.
Por último, tratando de entender los intereses de la intendencia en el conflicto, dijo: “No sé cuál es la negativa de la intendente a darle una solución rápida a esta cuestión, no nos explican a los vecinos, y sin embargo, tienen estas actitudes bastantes patoteriles, porque mandar a todA su gente a ingresar por la parte trasera del recinto del Concejo Deliberante y que se queden ahí por una hora antes de la sesión es como amedrentador, tratan de asustar a la gente, no sé cuál es la intencionalidad”, reclamó.