El último trimestre del año cerrará con la puja distributiva al tope.
En plena reapertura de paritarias y con una inflación que se estima más cercana al 100%, las organizaciones gremiales vienen confirmando que el nuevo piso será de un 95% anual. En ese porcentaje firmó la Asociación Bancaria (AB) después de unas negociaciones en “modo crucero”.
El acuerdo puede graficarse como un oasis en medio de un desierto cargado de medidas de fuerzas.
De hecho, sectores como la madera, químicos, personal de televisión y trabajadores del gas (garrafas), entre otros, están en conciliación obligatoria después de anunciar un plan de lucha. Y Camioneros, Aceiteros y distintas ramas de Sanidad ya están discutiendo aumentos que, de no otorgarse, podrían derivar en protestas.
Paralelamente a esto, el Gobierno mantiene activos los encuentros y el diálogo con los máximos referentes gremiales. Con intención de ganar protagonismo, el presidente Alberto Fernández se reunió con la mesa chica de la CGT para analizar la coyuntura laboral y política.
La jugada (por errores propios y ajenos) le salió tan mal que casi se parte la central obrera.
Para recomponer la situación, el jefe de Estado convocó al camionero Pablo Moyano y otros dirigentes del Frente Sindical para el Modelo Nacional (FeSiMoNa).
En ambas reuniones, se sondeó y analizó la aplicación de un bono (el piso sería $30.000) para todos los trabajadores y trabajadoras. La aplicación de este plus salarial es analizada en detalle por el Ministerio de Economía, tanto sobre la cifra como en la cantidad de cuotas que se podría abonar.
El otro debate es cómo se compatibiliza con las paritarias, herramienta que, para la CGT es indispensable para sostener el poder adquisitivo de los ingresos.
En el Gobierno señalan que no se van a eliminar, pero son conscientes del alto grado de trabajadores y trabajadoras que están fuera del sistema y que se estima en un 40% de la población laboral.
Impuesto a las Ganancias
Por otra parte, el jefe del Palacio de Hacienda, Sergio Massa, anunciaría en los próximos días la suba del piso del impuesto a las Ganancias -teniendo en cuenta los aumentos salariales acordados en los últimos meses- que es de 280.792 pesos, un número que quedó muy desactualizado y la intención sería llevarlo a 350.000 pesos.
La elevación del piso salarial de Ganancias fue una iniciativa del propio Massa cuando era titular de la Cámara de Diputados.
Mientras se siguen analizando estos beneficios, los sindicatos encaran el fin de año con los ojos puestos en sostener los ingresos ante el avance de una inflación que los pulveriza semana tras semana.
Para la dirigencia, la situación es desgastante, porque no sólo deben discutir con sus respectivas patronales, sino con las bases, que en asambleas reclaman ir “a la lucha, porque la plata no alcanza”, explicó a iProfesional el delegado de una base metalúrgica de Avellaneda.
Es que en los últimos meses, un gran sector de los trabajadores y trabajadoras con convenio han caído en la pobreza, una situación contradictoria en una economía que en la macro está creciendo.
En ese punto, los datos son elocuentes: récord de exportaciones; aumento de la producción industrial y baja el desempleo. Sin embargo, eso no se ve reflejado en el bolsillo de los trabajadores, mientras crecen ciertas prácticas de flexibilización laboral.
Salario Mínimo, Vital y Móvil
En la hoja de ruta de Massa figura además la convocatoria al Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil para la primera semana de noviembre, para luego darle espacio al llamado de la Comisión Nacional del Trabajo de Casas Particulares.
El personal doméstico firmó un 36%, en cuatro pagos del 9%.
La paritaria de los bancarios es representativa no por los salarios, sino porque abarca el año calendario: de enero a diciembre.
Con este 94,1% se ubica en 4,1% por encima de lo que presupuestó el Ejecutivo para 2022, aunque algunos analistas económicos hablan del 100% de inflación.
Los que parece que le hicieron caso a estos porcentajes fueron los del Sindicato del Seguro que encabeza Jorge Sola (también secretario de Prensa de la CGT). El sector logró un 109,75% con sueldos básicos de $200.000.
No menor fue el incremento conseguido por el Sindicato de Perfumistas que lidera Rubén Sandoval, con una mejora del 90%, del que ya se pagó un 7% en junio; 10% en julio y 10% en agosto y ahora deberán liquidar un 10% en octubre; 20% en noviembre; 13% en diciembre; 10% en enero y 10% en febrero.
A esto hay que agregarle unos $7.430 por guardería y $550 por comedor. Ese 90% hoy sería el “piso” establecido por las organizaciones gremiales que tratan de pactar con las patronales que, más allá de lo firmado, quede abierta la posibilidad de analizar la situación frente a la fuerte suba de la inflación.
Reclamos
En los próximos días, el Sindicato de Choferes de Camiones que lidera Hugo Moyano se sentará formalmente con los empresarios para negociar un aumento.
Hasta el momento recibieron un 31% en dos cuotas. El secretario Adjunto del gremio, Pablo Moyano, declaró: “Esperemos que las patronales no vengan con ningún planteo raro”. Es decir, si no se tienen en cuenta los porcentajes del costo de vida, seguramente derivará en medidas de fuerza.
Por su parte, la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina (FTCIODyARA) cuyo secretario General es Daniel Yofra, solicitó la reapertura de las paritarias para reclamar una recomposición, partiendo de un básico que hoy está en $184.000.
Pero no todo está relacionado con los salarios. En sectores de la salud y la educación están planteando demandas que tienen que ver con el recorte presupuestario dispuesto por el Ministerio de Economía.
Y en el caso de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA) la paralización total de la actividad está vinculada con las dificultades que enfrenta el intento de rescate de la Cooperativa Sancor.
El gremio anunció que en los próximos días podría disponer un plan de lucha si el Gobierno nacional no garantiza el funcionamiento del fideicomiso que busca recuperar la cooperativa.
Desde 2017, Sancor atraviesa un complejo momento económico y financiero, a partir de la pérdida de producción y posicionamiento en el mercado.
Entre los empresarios comprometidos en el rescate se encuentran José Urtubey (Celulosa Argentina), Marcelo Figueiras (Laboratorio Richmond), Gustavo Scaglione (La Capital de Rosario), el abogado Leandro Salvatierra y Jorge Estévez.