Durante la última semana de junio se venció el plazo de prórroga y de vigencia de cuatro emergencias (la sanitaria y epidemiológica; la agropecuaria; la hídrica y la ígnea) que el gobernador Oscar Herrera Ahuad fue decretando a medida que se sucedieron situaciones extraordinarias que afectaron a miles de misioneros.
Sin embargo, a diferencia de 2021, PRIMERA EDICIÓN pudo saber en exclusiva que -esta vez- el mandatario provincial decidió no firmar un nuevo período de vigencia de cuatro de esas emergencias. Entre el 25 y el 30 de junio, de manera separada, las mismas fueron perdiendo vigencia al no considerarse necesarias para los meses siguientes.
En el caso de la que funcionó durante la llegada del COVID, al no renovarse, dejó de sostener el estatus de obligatorio del uso de barbijo o tapabocas que el Comité Científico provincial acaba de sugerir sostener en los espacios cerrados. Sin embargo, a partir de esta novedad, habrá que esperar una resolución del mencionado espacio interdisciplinario que preside el vicegobernador Carlos Arce, respecto a las escuelas, institutos de educación superior y universidades que se regían por la normativa provincial. Resta una semana de vacaciones de invierno en Misiones para que haya un posicionamiento institucional destinado a padres, alumnos y docentes de los establecimientos.
De igual manera, serán los municipios los que deban actualizar las medidas sanitarias en el sector comercial de cada comuna. El ingreso a locales, la participación en eventos en espacios cerrados (boliches, recitales, etc) implicaba hasta junio el uso de barbijo. Aunque es sabido que en muchos lugares dejaron de exigirlos y los misioneros de utilizarlo como medida preventiva.
Caso por caso
• La sanitaria y epidemiológica que fue dictada por decreto 330/20 de marzo de 2020, cuando la Organización Mundial de la Salud declaró la emergencia por la pandemia de COVID-19. Por decreto 2679/21, del 28 de diciembre pasado, se prorrogó por sexta y última vez hasta el 30 de junio de 2022. Paralelamente, fue acompañada por la ley del Pasaporte Sanitario, que fue reglamentado de manera conjunta por los ministros Marcelo Pérez (Gobierno) y Oscar Alarcón (Salud Pública). Con ella fueron cambiando las exigencias: desde el domicilio en la provincia para trasponer El Arco y Centinela; la del test anticovid; la exigencia de dosis de vacunas contra el COVID, entre otros.
• La agropecuaria que se dictó por decreto 2686 del 28 de diciembre de 2021 por 180 días. Se debió al largo período de sequía y hasta inundaciones y caída de granizo que provocó pérdidas a diferentes producciones misioneras. La Nación dictó un instrumento similar con posterioridad.
• La hídrica fue dictada por decreto 1.286 del 29 de julio de 2021, acompañando el decreto nacional N°482/2021 que declaró el “Estado de Emergencia Hídrica”por la significativa bajante del cauce en el río Paraná que se extendió por dos años y el cual, lentamente, va recuperando su normalidad
• La ígnea determinada por decreto 2688 del 29 de diciembre de 2021, a partir de los incendios forestales que arrasaron decenas de hectáreas de bosques nativos y cultivados, incluso en áreas protegidas provinciales. En forma paralela se conoció el estado de emergencia ígnea en todo el territorio nacional decretado por el Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA).
Recomendación de uso del barbijo
En la última reunión del Comité Científico de Misiones, se emitió un comunicado el pasado 4 de julio donde se realizaron “recomendaciones” a la población, respecto al contexto sanitario. Entre ellas estuvieron:
• Uso de barbijo o tapaboca: “Con énfasis en ambiente cerrados o hacinamiento humano”.
• Medidas de cuidado general: lavado frecuente de manos, ventilación permanente de los espacios, entre otras.
• “El cumplimento de esquemas de vacunación: anti COVID-19 y antigripal”.
• “Se recuerda que en esta etapa de transición, el objetivo general es disminuir morbimortalidad de las infecciones respiratorias agudas por SARS CoV-2 y otros virus respiratorios, por ello: se mantiene la vigilancia universal de SARS CoV-2, en poblaciones vulnerables y en casos internados, e integración a la vigilancia universal de casos graves y fatales de estudios de Influenza y OVR (otros virus respiratorios). Continúan funcionando las unidades centinela (unidades de monitoreo) ampliada de COVID-19 y ETI”.
¿Qué pasará en las escuelas?
Mientras se espera una resolución del Comité Científico de Misiones antes del reinicio de clases, organizaciones de padres y profesionales de la salud venían solicitando que se deje de exigir el uso del barbijo en las escuelas. En una reciente entrevista con FM 89.3 Santa María de las Misiones, la fonoaudióloga, especializada en implantes cocleares y fundadora del Banco de Audífonos que funciona en el Hospital de Pediatría Fernando Barreyro, Natalia Zajaczkowski, ratificó que “ya está probado que el barbijo es una barrera para la comunicación, tanto para el docente que está muchas horas frente al aula, como para los alumnos porque afecta el aprendizaje”.
Según indicó la profesional, la mayoría de los aprendizajes son a través del lenguaje hablado y el barbijo hace de barrera para la salida del sonido, por lo que se pierde claridad e intensidad. “Por ello, el docente se ve obligado a forzar su voz y esto se nota aún más en aquellos que tienen doble turno. Obviamente, también esto impacta en el alumno que recibe ese sonido atenuado y distorsionado porque la tela hace de absorbente”, señaló.
Aunque es una barrera de comunicación y socialización para los niños, Zajaczkowski indicó que lo sufren todavía más los más pequeños, los más tímidos porque tienen ese bozal o barrera, los que se incorporaron a un nuevo grado donde no conocían a sus compañeros y, por supuesto, los niños que usan audífono.
“Mis pacientitos con audífonos e implantes cocleares padecieron (y padecen) el uso del barbijo. También los pacientes adultos mayores que vienen al consultorio nos piden que nos bajemos el barbijo porque no alcanzan a entender lo que decimos”, contó.
“Hay una repercusión directa en el aprendizaje. No solamente elimina la posibilidad de la lectura facial, las pistas de la cara y los movimientos del rostro que hacen a la comprensión del lenguaje. La expresión facial complementa el significado de la comunicación verbal, una misma oración puede significar cosas diferentes según el tono y la expresión. Lógicamente, esto repercute en el niño que aprende y en su aspecto emocional”, destacó.