Néstor Fabián Rojas está imputado por “homicidio agravado por el uso de armas de fuego” y “homicidio criminis causa” y recibió en las últimas horas la prisión preventiva, por decisión del juez de Instrucción 3 en relación al doble homicidio ocurrido en diciembre del 2015.
La notificación será remitida desde la Justicia misionera a la cárcel federal de Ezeiza donde está alojado el apuntado como uno de los delincuentes más peligrosos de Misiones.
El juez Verón es el encargado de investigar el doble homicidio de Sebastián Vega y Rodrigo Ibarra ocurrido poco antes de la Navidad del 2015, y por el hecho se sospecha del “Negro” Rojas quien en las próximas horas será notificado de la prisión preventiva.
La resolución se conoció en el marco de otra investigación que tiene en la mira al supuesto sicario narco, respecto al plan que aparentemente ideó desde la cárcel para matar a dicho magistrado y que tiene hasta el momento cuatro personas detenidas.
En esa causa, una mujer debía prestar ayer declaración indagatoria pero la audiencia, bajo la órbita del juez de Instrucción 1 Marcelo Cardozo, se suspendió por ausencia del abogado defensor y pasó para hoy. También podrían declarar los restantes detenidos, todos apuntados como colaboradores de Rojas.
Comienzo de la era Rojas
Respecto a una de las causas que lo tiene en la mira, está imputado por “homicidio agravado por el uso de armas de fuego” en la muerte de Sebastián Vega y “homicidio criminis causa”, en la muerte de Rodrigo Ibarra. Ese hecho ocurrió en diciembre de 2015 cuando los nombrados aparecieron muertos dentro de un automóvil Chevrolet Agile en el barrio Tacurú, cerca de El Acuerdo. Allí se comenzó a hablar del “Negro” Rojas.
Antes de ser capturado en un complejo turístico en Posadas, en agosto del 2018, Rojas estuvo prófugo de la Justicia desde el 17 de diciembre de 2015, tras el doble crimen mencionado que habría tenido su origen en un supuesto ajuste de cuentas por varios embarques de cannabis sativa que habrían sido “mejicaneados” y descubiertos por la Gendarmería Nacional en suelo correntino.
Rojas además enfrenta más acusaciones que podrían finalizar en al menos dos condenas de prisión perpetua. Es que además del doble homicidio, espera resolución por el crimen de un mecánico en la localidad de Gobernador Roca, donde también es sospechoso.
Rojas estuvo detenido en Misiones desde el lunes 13 de agosto de 2018, ocho días después del homicidio a balazos de Aldo Andrés Cantero (31) en Gobernador Roca, pero estaba prófugo desde la fecha señalada por lo ocurrido en el barrio Tacurú. Al momento de su captura, el por aquel entonces juez de Instrucción 7, Carlos Giménez, lo imputó por “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” (artículos 79 y 45 bis del Código Penal Argentino), calificación por la que enfrentaría, en caso de ser hallado culpable, una posible condena de hasta 35 años de prisión, el doble si es hallado culpable en ambas causas.
Otro presunto crimen narco
La muerte de Cantero en una chacra de Roca se produjo por un supuesto ajuste de cuentas relacionado al mundo del narcotráfico, ambiente en el que Rojas fue reiteradamente señalado como distribuidor de estupefacientes y sicario.
Se lo acusa de ejecutar a Cantero de cuatro balazos, dos en la frente y el rostro y los restantes en el abdomen y una pierna. El cadáver fue descubierto por la Policía pocos minutos después de que la pareja de la víctima alertara de que en la chacra a 500 metros de la ruta nacional 12 había ocurrido algo grave, según el llamado telefónico que recibió.
El cadáver fue identificado y, con las primeras horas del sol del día siguiente, investigadores policiales descubrieron que debajo del piso de un galpón de herramientas se ocultaban poco más de 1.800 kilogramos de marihuana.
La detención del temido delincuente se logró en dos cabañas de un lugar ubicado a metros de la avenida Urquiza, donde escondía en un bolso poco más de tres kilogramos de cocaína que, se presume, iban a ser vendidos a tres hombres entrerrianos.
Luego de su detención, en otro procedimiento realizado en un inmueble relacionado a Rojas en Eldorado, se halló una pistola nueve milímetros, cuyo peritaje dio positivo con las municiones recolectadas del cuerpo de Cantero.
Traslado
Efectivos del Servicio Penitenciario Provincial trasladaron el jueves 24 de octubre de 2019, en un operativo de extrema seguridad, a Néstor Fabián Rojas rumbo a la cárcel de Ezeiza, Buenos Aires.
El señalado como un temido sicario y narcotraficante actualmente enfrenta ante la Justicia en Misiones, los tres homicidios mencionados y al menos una causa por narcotráfico.
Se necesitaron dos móviles del SPP e integrantes del Grupo de Intervención Especial Penitenciario (GIEP) para llevarlo hasta el complejo de máxima seguridad del país, según destacaron las fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN.
Se realizó desde la Unidad Penal 6 en Posadas, y por orden del Juzgado Federal de Eldorado, a cargo de Miguel Ángel Guerrero. Esto a raíz del peligro de fuga y que fuera rescatado por contactos paraguayos en un golpe comando y con gente ligada a la PCC de Brasil. Todo esto fue negado por Rojas, quien aseguró no ser “el temido hombre” que dicen que es y que nunca “mató a nadie”.
Indagatoria postergada
Rojas es apuntado como el ideólogo de un plan macabro de asesinar a un juez de Instrucción en Posadas, justamente el que lo investiga por uno de los casos mencionados. Hace unos días, una mujer y otros tres hombres, fueron detenidos en el marco de allanamientos para establecer si tuvieron contacto con el “Negro” Rojas y así saber más de ese supuesto plan.
La mujer de 34 años debía prestar declaración indagatoria ante el juez de Instrucción 1, Marcelo Cardozo, pero la audiencia fue postergada para hoy por ausencia del abogado defensor.
La mujer es la pareja de uno de los laderos o principales colaboradores del narcotraficante y presunto sicario Néstor Fabián Rojas en Misiones y se cree que tuvo contacto con el mencionado, cuando otros hombres, fueron detenidos en el marco de la investigación por el plan para terminar con la vida del magistrado Fernando Verón.
“Hay que liquidar al juez Verón”, fue la frase que supuestamente le atribuyen a Rojas desde la cárcel aunque en contacto con este Diario, lo tomó como un elemento más que pretenden utilizar “para culparlo de cualquier cosa”.