Desde la comunidad El Doradito, ubicada en Caraguatay, denunciaron que hace días se realizan trabajos en la selva, con una importante pérdida de madera nativa. En un principio, denunciaron este hecho ante la Unidad Regional XV de Montecarlo y luego presentaron una segunda denuncia ante el Ministerio de Ecología. Según declaraciones de los vecinos, la empresa que efectúa la limpieza del monte cuenta con un permiso de Ecología, pero aseguran que son territorios relevados y protegidos por la Ley 26160 Registro Nacional de Comunidades Indígenas. En esta comunidad también vivieron momentos de tensión hace algunos años atrás cuando lograron frenar a personas que habían iniciado un proceso de tala en el lugar.
La comunidad
En comunicación con PRIMERA EDICIÓN la mburuvicha de la comunidad, Gregoria Duarte, contó que “estamos defendiendo nuestra tierra y territorio donde vivimos hace más de 70 años”. En este sentido, remarcó que “nací y me crié aquí” y en el reclamo de la comunidad dejaron constancia de que, como representantes de este pueblo mbya, “nadie vino a consultarnos”.
Recordó que, hace más de una semana atrás un grupo de niños recorrió el monte y se encontraron con un trabajo de limpieza en unos terrenos: “Rápido vinieron a comentarnos y fuimos hasta allá, pero no nos hicieron caso y dijeron que nadie los iba a sacar. Así que fuimos a la comisaría para denunciar y después el jueves se entregó la nota en Ecología”.
En un primer momento, la Policía fue hasta el terreno, pero no obtuvieron buenos resultados “porque dijeron que tienen permiso para sacar la madera nativa, hacer el rosado, según me dijeron los policías”.
Duarte explicó que el territorio se encuentra relevado y bajo protección. Actualmente, en El Doradito “son en total 96 personas, con 13 familias” y sobre la situación de esta tekoa resaltó que “ahora por suerte tenemos un intendente que al menos va a mirar por nuestra aldea, porque anteriormente nadie venía a ver la necesidad que teníamos, ni siquiera Asuntos Guaraníes”.
Contó que la comunidad se encuentra en un punto alejado de las áreas urbanas, ya que “San Vicente queda a 22 kilómetros y hasta Caraguatay son 40 kilómetros de camino”, indicó Duarte.
La cacique afirmó que, tras la presentación de esta denuncia, “todavía no tenemos respuestas de cómo va a continuar esta lucha”. Asimismo, compartió que “hace cuatro años atrás casi perdimos toda la comunidad, porque una persona de San Vicente entró con máquinas, tumbó todo el monte que había y sacó casi 100 cargas de maderas. Esa vez lo atajamos y hasta ahora este hombre que dijo ser el dueño de todo no volvió”. En aquel entonces, “denuncié en la comisaría de Caraguatay, después estuve en el Juzgado de Eldorado”, relató.