El saludo al sol en yoga es una de las prácticas más habituales en cualquier sesión, sea grupal (impartidas en centros especializados en yoga y bajo la dirección de uno o varios instructores), o bien en sesiones individuales realizadas por practicantes de esta disciplina.
Saber cómo se hace el saludo al sol es necesario e imprescindible para cualquier yogui, especialmente si hablamos de principiantes.
¿Qué es el saludo al sol? Es una secuencia de asanas o posturas de yoga, y que se suele realizar durante las clases a modo de calentamiento. Se compone de 7 asanas en las cuales se deben realizar 12 movimientos (repitiendo 5 de ellas).
Estos movimientos buscan estirar los músculos y aumentar su flexibilidad. De esta forma, las clases de yoga podrán transcurrir con mucha más fluidez y seguridad.
El saludo al sol también es realizado por los practicantes de yoga al inicio del día, para empezar la jornada con la mente y el cuerpo preparados.
El tipo de asanas que lo forman lo convierten en un ejercicio muy completo dentro del yoga, ya que además de trabajar el cuerpo, también trabaja la respiración e incide en los chakras.
El saludo al sol en sánscrito se le conoce como sūrianamaskāra.
Sūria es el dios del Sol en el hinduismo.
Namah significa hacer reverencias en posición postrada.
Kāra significa realizar.
Tipos de saludo al sol
Saludo al sol A: es la forma de saludo al sol realizado en Ashtanga yoga, una modalidad de yoga muy dinámica en la que se busca la fluidez. Es un saludo al sol muy potente que requiere mucha energía.
Saludo al sol B: se trata del otro saludo que se realiza en Ashtanga yoga, siendo también muy potente y que consta de un mayor número de asanas.
Saludo al sol C: es considerado el saludo al sol clásico o estándar, el cual es mucho más calmado y accesible para practicantes principiantes.
Asanas del saludo al sol clásico
Las posturas que forman el saludo al sol clásico, o Surya Namaskara C son 7, como ya hemos dicho, y de estas 7 se van a repetir 5 hasta llegar a los 12 movimientos citados.
Cada movimiento se va a centrar en un chakra, en una parte de la respiración y en un mantra.
Beneficios del saludo al sol
El saludo al sol de yoga ofrece una serie de beneficios a los practicantes que lo realicen tanto en sus clases, como a aquellas personas que lo realicen al iniciar el día.
Mejora la flexibilidad muscular y articular debido a las asanas que se realizan.
Mejora nuestro equilibrio y, con ello, nuestra capacidad locomotora.
Permite masajear los órganos del abdomen, lo que ayuda a que mejore el proceso digestivo.
Ayuda a calmar la mente y a reforzar nuestra fuerza interior.
Permite mejorar la circulación sanguínea.
Ayuda a depurar el organismo favoreciendo la expulsión de sustancias de desecho del mismo.
El trabajo físico realizado hace que se fortalezca el corazón.
Sirve para equilibrar los chakras.
Ayuda a minimizar la tensión mental, la ansiedad y el estrés que podemos ir acumulando a lo largo de los días.
Es la mejor forma de comenzar un día con fuerza y entereza.
Trabaja toda la musculatura por igual, ya que todas las zonas de cuerpo se van a ver involucradas.
Qué tener en cuenta al hacer el saludo al sol
Una vez se domina el saludo al sol resulta muy sencillo practicarlo. Sin embargo, deberemos tener en cuenta ciertos aspectos para que esta práctica resulte lo más fructífera y beneficiosa posible.
El lugar
El saludo al sol consiste en realizar una secuencia de asanas para las cuales se deberá contar con un espacio y una cierta ambientación.
Disponer de un espacio lo suficientemente amplio para poder realizar las asanas con libertad.
Una habitación, un lugar en el jardín o terraza, incluso en el balcón si su tamaño lo permite, también podremos mirar hacia el sol.
La concentración
A la hora de hacer el saludo al sol deberemos intentar conseguir el estado de concentración mental adecuado.
Nada deberá poder distraernos durante la práctica, estando atentos en todo momento a lo que hacemos. Cuanto más concentrados estemos en nuestra práctica del saludo al sol, mayores serán los beneficios que nos ofrezca.
Constancia
Hacer el saludo al sol un día al mes no servirá para mucho… Para obtener sus beneficios deberemos ser constantes en su práctica y realizarlo prácticamente a diario.
Relajación
Una vez hemos hecho el saludo al sol será conveniente relajarse tumbándonos boca arriba o en cualquier postura cómoda.
Esto nos ayudará a relajar el ritmo respiratorio y el pulso cardíaco, además de permitirnos concentrarnos en nuestro cuerpo y mente.