El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación efectuó una polémica compra de yerba mate de marcas casi desconocidas para distribuir en los programas de asistencia social, por la suma de $18 mil millones.
Lo hizo sin pedir ni aceptar recomendaciones del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), que se ofreció a dar sugerencias para elegir mejores proveedores, luego de que se detectaran productos de baja calidad en licitaciones anteriores.
En esta ocasión se trata de una compra de 12 millones de kilos por más de $18 mil millones mediante la “Decisión Administrativa 878/2023” publicada ayer en el Boletín Oficial de la Nación en el marco de la licitación Pública N° 95-0058-LPU23.
Las dos marcas de yerba adquiridas son totalmente desconocidas: “El buen ojo” y “Sierra del imán”, que consiguieron de tres proveedores, más o menos al mismo precio por cada paquete: “El buen ojo” una firma lo vendió a $1.517 y otra a $1.518,50. Mientras que “Sierra del imán” a $1.518,90.
El detalle indica: Compañía Comercial Mayorista S.R.L. (C.U.I.T. Nº 30-71403852-0) por la cantidad de 600.000 envases de yerba mate de un kilo, marca El Buen Ojo, cuyo precio unitario es de $1.517, por un monto total de $910.200.000.
Ignacio Kleñuk (C.U.I.T. Nº 20-07554735-9) por 2.400.000 envases de un kilo, marca El Buen Ojo al precio de $1.518,50, por un monto total de $3.644.400.000.
Y Hugo Oscar Holowaty (C.U.I.T. N° 20-17950686-7) por la cantidad de 9.000.000 de envases de un kilo, marca Sierra del Imán a valor de $1518,90, por un monto total $13.670.100.000.
El artículo 5 autoriza a la Dirección de Compras y Contrataciones del Ministerio a emitir las correspondientes Órdenes de Compra por la suma de $18.224.700.
El Ministerio justifica la compra en una “evaluación técnica” solicitada por la Secretaría de Articulación de Política Social a la Universidad Nacional de San Martín donde se aconsejó qué propuestas aceptar y cuáles desestimar.
“Ellos definen y después nos informan”
Al respecto, Marcelo Hacklander, director del INYM por el sector de la Producción, señaló que “las licitaciones corren exclusivamente por lo que es Desarrollo Social de la Nación. Ellos definen y terminan comprando a quien creen conveniente. Después de eso nos informan al área de calidad del Instituto, que es quien se encarga de hacer el control de la materia prima utilizada”.
En declaraciones a FM 89.3 Santa María de las Misiones, explicó que “tampoco escapa que en algún momento ocurra algún tipo de diferencias entre la calidad óptima y lo que venía pasando hace un tiempo atrás”, dijo en referencia a ocasiones donde encontraron yerba de mala calidad.
“Por eso nosotros queremos que la gente que reciba ese producto nos informe la calidad que está teniendo. En base a eso, nosotros también vamos a actuar y vamos a sancionar a quien corresponda”, especificó.
“El INYM controla la materia prima. El Instituto tiene incidencia hasta el paquete, después ya pasa a depender de el Ministerio de Salud y Saneamiento Ambiental”, sostuvo Hacklander. “Nosotros, igualmente, para proveerle estampillas, controlamos la calidad de la yerba canchada que esta gente tiene para meter dentro de los paquetes”, dijo.
El año pasado, justamente Hacklander había informado que en abril se clausuró un molino en San Vicente por utilizar productos de mala calidad. Esa noticia trascendió después de una licitación similar donde la Nación le había comprado, otra vez, a dos empresas que están siempre presente en las licitaciones de Desarrollo Social.
“No podemos meternos”
Otro de los directores por la Producción del INYM, Jonás Peterson, coincidió en que “no podemos meternos en la cuestión comercial” pero que “vamos a ser muy firmes en el control de calidad”, que sí es parte de sus funciones como Instituto.
“Nosotros planteamos que sería bueno que se abra un poco más la jugada, habiendo tantas empresas pequeñas y medianas que hacen muy buenos productos que también podrían ser parte de esto, pero la verdad es que nosotros, más que hacer el intento, no podemos meternos en la cuestión comercial entre el Ministerio y las empresas”, lamentó Peterson en el programa Primera Plana de la FM 89.3 Santa María de las Misiones.
Pero remarcó: “Ya que tienen la oportunidad de hacer un negocio tan grande y tan importante en nombre de la gente que más necesita, no vamos a permitir que a esa gente le llegue un producto de mala calidad. Vamos a trabajar fuertemente en el control de la calidad de esos productos”.
“Obviamente hay algunos pícaros que muchas veces se nos escapan y vamos a tratar de que esas picardías no sucedan”.
“Nosotros estuvimos en una reunión en Buenos Aires en la que pedimos poder ser veedores de la calidad de ese producto, ellos también se mostraron muy interesados en ese momento en que podamos controlar juntos la calidad del producto. La idea es que, cuando salen las partidas, se le informe al área de fiscalización del INYM y que éste pueda estar ahí atento y fiscalizando la materia prima con la que se labora ese producto”.
Respecto a la actual situación de los proveedores, cuestionados e incluso castigaos en ocasiones anteriores, sentenció que “si están operando, es porque están al día y están trabajando en regla”.
En cualquier caso, Peterson abogó por que, cuando se hace una licitación de estas características, con tantos millones de paquetes adquiridos, “sean compras más chicas y más distribuidas. Que sigan haciendo acuerdos importantes con estas empresas que pueden hacer grandes volúmenes, pero por ahí también que se le dé oportunidades de negocio a los más chicos“.