Impulsado por la Comisión Cooperadora de la Escuela Especial N°52 y con el acompañamiento de vecinos, este lunes se realizará una movilización en reclamo del nuevo edificio escolar que aguardan, luego de que en octubre del año 2021 un incendio consumiera las antiguas instalaciones.
Mientras tanto, continúan asistiendo a clases en una parte del viejo hospital local que también se encuentra en muy precarias condiciones. Los “containers” que conformarán la nueva escuela se encuentran desde hace tiempo en el lugar y empiezan a deteriorarse ante la falta de avance de los trabajos.
El titular de la Comisión Cooperadora de la Escuela Especial N° 52, Oscar Yagusieczko, explicó a PRIMERA EDICIÓN que “venimos reclamando desde hace casi dos años y esperando hasta ahora de manera pacífica, con la esperanza de que se concrete la construcción del nuevo edificio pero no se ve que eso ocurra, que se termine de concretarse”.
Agregó que “las clases se cumplen en una parte del viejo hospital, que nos prestaron por unos días, donde el propio director del hospital aclaró desde un principio que sea por un tiempo nomás porque no era un ambiente recomendable para nuestros chicos porque se exponen a cualquier tipo de virus, bacterias, debido a que el hospital funcionó en ese sitio durante muchos años. Incluso se hizo un nuevo hospital por todos los inconvenientes que tenía el edificio anterior incluso para los propios médicos y ahí es donde los chicos hoy dan clases”.
Olvidados
Lo que angustia a Yagusieczko, padres, docentes y alumnos es que “trajeron los contenedores que conformarán la nueva escuela pero no le dieron más seguimiento a la obra. Nos habían llevado al viejo hospital por unos días nomás y ya vamos camino a los dos años. Teníamos la esperanza que comenzaríamos las clases este año en las ‘modernas’ instalaciones, como nos prometieron, pero nada de eso ocurrió”.
La Escuela Especial N°52 cuenta actualmente con una matrícula de 70 chicos y funciona hace doce años. “El señor Gobernador cuando se prendió fuego nuestra escuelita vino ahí mismo y se comprometió que en 60 días íbamos a tener la nueva escuela. Entendemos que puede estar muy ocupado pero hay otros funcionarios y el mismo intendente (Fausto Rojas) que deberían hacerse eco de la situación. No puede ser que el propio Gobernador tenga que venir y ponerse a reparar los contenedores para que los chicos tengan un lugar digno para estudiar”.
Son varios los contenedores que fueron llevados hasta el sitio en el cual deben terminar de armarse y donde funcionarán las aulas, la dirección y los sanitarios. También recordó Yagusieczko que “desde el año pasado venimos con el problema que los chicos no pueden usar el baño allí donde concurren a clases y tampoco tienen agua, como Cooperadora teníamos que comprar para que ellos puedan tener para tomar”.
Confirmó que “el lunes nos vamos a movilizar. No tenemos el apoyo del intendente pero sí de los vecinos, los padres, los docentes y los alumnos. Vamos a trancar la calle frente a la escuela para que el funcionario al que le corresponda venga, se haga cargo y nos brinde una solución concreta, no que sean solamente promesas”.
Otro de los padres también aportó su visión del problema de la falta de continuidad de las obras y apuntó que “hoy solamente son cajas metálicas abandonadas las que están sobre los pilotines. En su momento era lo que nos podían dar, así se firmó el contrato y confiamos en que sería la solución más rápida para los docentes y los niños pero no fue así”.
Con mucho pesar manifestó: “Lamentamos por nuestros chicos las condiciones en las que deben estudiar al igual que los docentes y los profesionales porque no es digno y eso nos genera impotencia. Solamente buscamos que vengan los obreros que hagan falta para que se pueda terminar lo antes posible de recuperar esos contenedores que si siguen estando descuidados directamente no servirán para nada”.