Esta semana fueron noticia a nivel nacional los desbarajustes económicos y el dólar que llegó a su pico de 280 pesos, lo que generó una preocupación colectiva, especialmente en aquellos que trabajan con productos traídos del exterior. Ese es el caso de los odontólogos, que trabajan con instrumentación, insumos médicos y equipos especializados, cada vez más inaccesibles no sólo por el precio. Así lo confirmó, en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones, el presidente del Colegio de Odontólogos de Misiones, Oscar Quagliozzi.
“El dólar nos complicó muchísimo siempre, ya veníamos arrastrando la dificultad para que ingresen ciertos productos, no sólo por los precios sino por dificultad en tema de aduana, algo que afecta a casi todos los sectores médicos”, explicó.
Es así que, en este momento, por la variación del dólar minuto a minuto, las casas de venta e insumos y equipamiento están en pausa, directamente sin pasar precios, indicó Quagliozzi; lo que “nos genera una incertidumbre porque lo que la semana pasada habíamos previsto comprar esta semana va a estar a un precio muchísimo más alto”.
Por otro lado, a esta problemática se le suma que los aranceles que manejan las obras sociales en acuerdo con el Círculo de Odontología, no condicen con la inflación y no son económicamente rentables, por lo que muchos odontólogos se abren camino a trabajar de forma particular.
Abandono a las obras sociales
El conflicto con las obras sociales es de larga data y una situación que se replica con todas las especialidades médicas, ya que en muchos casos los honorarios que pagan a los profesionales no llegan ni al valor ético mínimo.
“Obvio que el odontólogo como cualquier laburante le busca la vuelta, pero no podemos claudicar en reclamar que necesitamos regularizar los aranceles para mínimamente estar cerca de la inflación, ya que es una utopía para nosotros estar por encima de ella, por eso esperamos estar al menos cerca”, explicó Quagliozzi.
Lo mismo sucede con las prepagas, donde el aumento de las cuotas a los afiliados no condice con el aumento a los honorarios médicos.
“Esto conlleva que muchos colegas o dejen de atender con obras sociales y prepagas, o que entren en la situación de tener que cobrar una diferencia. Una situación que no es ideal ni justa para nadie, pero ante la falta de respuestas no nos queda otra alternativa” afirmó. Esto también contribuye a una relación tensa entre el paciente y el profesional, ya que el paciente mes a mes abona la prepaga y ésta se compromete a cubrir el 100% del servicio, pero en el consultorio se genera un conflicto.
“Es angustiante la situación en la que nos ponen las prepagas porque queremos atender a las personas y éstas necesitan atención”, explicó.
Es por eso que normalmente se llega a un acuerdo con el paciente por fuera de la obra social que puede ser una financiación con tarjeta de crédito o en cuotas.
“Vamos empeorando mediante pasa el tiempo y la solución siempre está en salirse de las obras sociales a pesar de que esto no les guste a los Círculos, porque no cierran los números. En mi caso particular yo dejé las obras sociales a pesar que la mayoría de mis pacientes tengan. En el consultorio buscamos la vuelta para atenderlos porque vivimos de eso, y con la mayoría de nuestros pacientes ya tenemos una relación de confianza que nos permite atenderlos buscando la manera, como una financiación”, señaló Quagliozzi.
Ante esa situación crítica, desde el Colegio de Odontólogos, presentaron a la Cámara de Diputados provincial un proyecto de ley de aranceles mínimos odontológicos que busca situar los honorarios cerca del rango inflacionario; por el cual probablemente la semana que viene se reúnan a debatir con las autoridades.