Estaciones de servicio de Paraguay iniciaron este jueves una medida de fuerza que afecta la carga de combustible en ese país, debido a una protesta de estacioneros nucleados por la Asociación de Propietarios y Operadores de Estaciones de Servicio y Afines (Apesa) que reducirán sus horarios de atención.
Todo comenzó con la puesta en marcha del proyecto de Ley de Subsidio lanzada por el Gobierno paraguayo y que tiene media sanción del Senado. Dicha ley reduce los precios del combustible en los surtidores de la estatal Petropar, pero no incluyó a las petroleras privadas establecidas en el país.
La decisión no cayó nada bien en Apesa, en lo que consideran “una competencia desleal”. Por eso desde hoy llevan a cabo una protesta con reducción de atención. Sólo atienden de 6 a 14 horas.
En un comunicado, también apuntaron que la decisión obedece a que siguen soportando “duras variables”, como la inflación, la sequía, el contrabando, corrupción en todos los niveles, los efectos de la pandemia.
Además, la guerra entre Rusia y Ucrania que afecta a todo el comercio internacional, a los cuales deben hacer frente con las herramientas que actualmente se vuelven insuficientes, según recoge el diario ABC Color.
Subrayaron además que se ven obligados al recorte de carga laboral de sus operarios. Y justifican que “esta medida es de fuerza mayor debido a la imposibilidad de hacer frente a los costos operativos”. Por eso, “lamentamos afectar la provisión de combustible en las estaciones de servicio”, indica el comunicado.