Flavia Ochoa, una ciudadana cordobesa de 39 años, presentó la primera denuncia en Argentina contra el laboratorio anglo-sueco AstraZeneca, alegando sufrir un síndrome que atribuye a la vacuna contra el coronavirus de la compañía.
Ochoa, residente en Coronel Moldes, fue diagnosticada con síndrome de Guillain-Barré con cuadriparesia después de recibir la tercera dosis de la vacuna el 4 de enero de 2022.
La demanda, presentada la semana pasada en el Juzgado Federal de Río Cuarto a cargo de Carlos Ochoa, solicita una compensación de 100 millones de pesos y apunta tanto al laboratorio como al Estado argentino. Este caso refleja las controversias que han surgido en Europa y el Reino Unido sobre los supuestos efectos secundarios raros de la vacuna de AstraZeneca.
Según el relato de Ochoa, experimentó fuertes calambres y debilidad en las piernas horas después de recibir la vacuna, síntomas que inicialmente interpretó como efectos secundarios esperados. Sin embargo, su condición no mejoró y fue diagnosticada con el síndrome de Guillain-Barré, un trastorno del sistema nervioso que puede causar debilidad muscular y parálisis.
A pesar de buscar atención médica y presentar su caso ante las autoridades de salud, la denunciante afirmó no haber recibido respuestas satisfactorias, lo que la llevó a buscar justicia a través de los tribunales federales. Su demanda busca cubrir los costos de tratamiento y compensar las pérdidas sufridas, incluyendo daños morales y materiales.
En su declaración, Ochoa sostiene que nunca fue informada adecuadamente sobre los posibles efectos adversos de la vacuna ni se le proporcionó un consentimiento informado adecuado