La presidente del Consejo General de Educación (CGE), Daniela López, aseguró ayer a PRIMERA EDICIÓN que “son falsas las versiones que hablan del cierre de divisiones en el Bachillerato Acelerado Para Adultos (BAPAyC) y en el Bachillerato Orientado Polivalente (BOP) 8 de Villa Cabello”.
Las versiones sobre el cierre de divisiones por escasa matrícula llegó ayer a ambas instituciones y de inmediato generó el repudio de los docentes. En el BAPAyC, los profesores decidieron visibilizar el reclamo cortando la calle Sebastopol, casi Blas Parera.
Según advirtieron los docentes, el problema es que se revisen las matrículas sin tener en cuenta las particularidades de las modalidades y contextos educativos.
“En la modalidad de adultos, como el BAPAyC, la asistencia de los estudiantes es bastante variable, algunos trabajan, otros tienen hijos, otros ambos, y eso hace que el ritmo de estudio sea otro, incluso que la asistencia no sea tan regular, y eso no se está teniendo en cuenta a la hora de cerrar cursos”, analizó uno de los docentes, Junior Duarte.
“No solo que nosotros nos vamos a quedar sin trabajo, sino que también estos estudiantes mayores, que quieren tener la posibilidad de terminar la escuela ya sea por objetivos personales simplemente, para seguir estudiando o para ingresar a un nuevo trabajo, se van a quedar sin esta posibilidad“, advirtió Duarte.
Docentes en asamblea

En tanto, cada vez son más los docentes de Misiones que se declaran en estado de asamblea sin atención de los alumnos, una modalidad de protesta en la escuela que es diferente en cada institución.
Vale decir que muchas escuelas iniciaron las asambleas en la segunda semana de abril tras la convocatoria de la UDA y el SEMAB-CEA. Estos gremios convocaron a asambleas rotativas de dos horas diarias sin atención de alumnos.
Pero lo que comenzó a ocurrir esta semana es distinto: docentes de distintos gremios -y muchos no agremiados- se unieron para expresar su disgusto por el insuficiente aumento salarial otorgado por el Gobierno provincial que garantizó un sueldo inicial de 208.000 pesos desde mayo.
Comenzó en las escuelas de Montecarlo donde este viernes, además, participaron en una masiva marcha. Y rápidamente se va replicando en las escuelas de toda la provincia: los docentes están en las escuelas, pero no dictan clases porque esperan que el Gobierno les garantice un salario digno: piden un aumento del 100% para poder llegar a un salario mínimo inicial de 400.000 pesos.
Según confirmó la dirigente del Frente de Trabajadores de la Educación en Lucha (FTEL), Mónica Gurina, para el lunes y martes se convocó a paro y asamblea para que los docentes puedan optar por la forma de protesta. El paro es sin asistencia a los lugares de trabajo y, la asamblea, en cambio, es con asistencia a la escuela pero sin atención a los alumnos.
“La lucha la tenemos que dar en las escuelas públicas y esperamos que también auditen las fundaciones que se sostienen con fondos del Estado pero no rinden ante el Tribunal de Cuentas”, advirtió Mariana Lescaffette del SEMAB.