La Federación Argentina de la Industria de la Madera y Afines (FAIMA) tiene nueva conducción. Por primera vez en 90 años de vida institucional, una mujer quedó al frente de la comisión. Se trata de la correntina Mercedes Omeñuka, presidente de la Asociación Maderera de la vecina provincia (AMAC) y socia gerente de un aserradero en Gobernador Virasoro.
Hasta antes de la elección, la empresaria se desempeñó como secretaria General de la entidad y ganó un comicio interno muy reñido entre dos listas que compitieron en FAIMA. La dirigente reemplazó al eldoradense, Román Queiroz.
En dialogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones y canal 9 Norte Misionero, Omeñuka se refirió a los desafios que le tocarán enfrentar, en un difícil contexto económico. “El desafío es mucho más importante por el contexto complejo que tenemos en toda la cadena. Tenemos una diversidad de Cámaras entre las 28 que agrupa FAIMA en todo el país. Yo presido AMAC que es más bien de actividad primaria, aserraderos. Pero tenemos cámaras que representan a bienes finales, construcción con madera y es diversificada nuestra federación. Dirigirla es compleja y queremos hacerlo de la mejor manera, gestionando para todos”, dijo.
Al ser consultada sobre las prioridades, Omeñuka dijo que una de ellas es “la reactivación del consumo, del mercado interno. Tenemos la mayoría de las cámaras que integran FAIMA en el sector mueblero de todo el país, y son las que están atravesando un momento muy complejo por la inflación, la caída en los ingresos que hacen que la gente priorice sus compras en otras cosas”.
“También, dentro de las medidas del Gobierno, está la apertura de importaciones con lo cual estamos atravesando una situación compleja. Pero esperamos que se vaya solucionando de manera rápida para que el impacto no sea tan fuerte”, agregó.
Omeñuka destacó que “desde el comienzo del nuevo Gobierno nacional hay diálogo. Hemos comenzado con gestiones en la Secretaría de Bioeconomía; la de Comercio Interior y la de Exterior. Si bien sabemos que la situación del país es compleja, van a tratar de facilitarnos el acceso a gestiones y trámites porque no hay plata. Entonces, vamos a ver con entidades privadas para ver qué ayuda podemos acceder”.
Admitió que “todavía no tenemos resultados concretos pero no dejamos de realizar las gestiones”.
La flamante presidenta de FAIMA aclaró que de los datos que manejas, “la mayor caída de venta es en empresas de bienes finales (muebles) y las fábricas están reduciendo horas de trabajo, obviamente porque no pueden seguir produciendo sin ventas”.
Agregó Mercedes Omeñuka que “todas las industrias que están dirigiendo sus ventas al mercado interno sin dudas que están sintiendo una reducción importante, sobre todo con la paralización de la obra pública. Nosotros y muchas empresas de mi zona, que tenemos mercados en exportación, estamos acomodando los números, no estamos bien, pero tenemos un lugar donde apuntar la producción, manteniendo la mano de obra. Pero, con al devaluación del dólar la estamos sintiendo en la rentabilidad”.
Omeñuka dijo haber sentido “mucha preocupación, enorme,” al escuchar al presidente Milei confirmando que no habrá obra pública del Estado nacional.
“Nuestro rubro trata de reinventarse, de ver cómo salir adelante con los mercados que se consigan para nuestros productos”, aseguró la presidenta de la FAIMA.