Si bien los funcionarios de la Casa Rosada intentaron no perder la iniciativa política en ningún momento del extenso tratamiento en general en la Cámara de Diputados de la Nación de la “Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos”, presentada el pasado 27 de diciembre y, conocida popularmente como Ley Ómnibus, la realidad indica que la rebelión de los gobernadores provinciales al ajuste de los gastos públicos, liderados por los mandatarios de la Región Centro de nuestro país, le provocó una victoria pírrica a Javier Milei que lo deja recapitulando la estrategia para los próximos debates que se sucederán el Congreso.
En una de sus intervenciones como jefe de la bancada dialoguista con el Gobierno, Hacemos Coalición Federal, el diputado Miguel Ángel Pichetto, recomendaba a los gobernantes “conocer la historia” como una manera de vislumbrar el futuro que siempre está por escribirse.
Por ello, es bueno recordar la victoria del rey Pirro del Epiro que, en el siglo III invadió Italia y logró victorias contra Roma, pero con un costo muy alto de hombres en las batallas que libró, por las cuáles terminó desgastando su campaña y abandonando la península itálica, totalmente derrotado.
Milei cedió en Diputados: ¿lo hará en el Senado?
Para Javier Milei será un tiempo de descuento, el que se abre de aquí hasta el martes 6 de febrero cuando los diputados tratarán en particular la Ley Ómnibus y por la cual existe completa incertidumbre por capítulos claves del dictamen aprobado en general como, delegación de facultades, privatizaciones e impuesto PAIS.
Otra experiencia temporal tendrán los mandatarios provinciales que ya probaron en carne propia la motosierra del Presidente y, es por esa razón, que continúan presionando por reabrir el paquete fiscal, cerrado, casi en su totalidad, por el ministro de economía, Luis Caputo y, pegando donde más duele, con la fecha de vencimiento por la vigencia del impuesto PAIS.
Tarde o temprano deberá ser tratado por el Congreso o la Justicia podría recibir miles de demandas por inconstitucionalidad del tributo “estrella” del último año.
Para los gobernadores, el tiempo juega a su favor. Porque saben que pujan con una administración carente de mayorías parlamentarias y el trámite de la Ley Ómnibus no se cerrará ni siquiera con la aprobación de los artículos más discutidos el próximo martes 6 de febrero.
Si superan esa prueba, los esperará otro round en un escenario más chico, menos ruidoso y más sofisticado como es el recinto del Senado de la Nación.
Avezados legisladores con varias sesiones dramáticas en sus currículums confiaron a iProfesional que “…los hombres y mujeres del Presidente son muy naifs o todo esto es un juego para la tribuna mientras Milei gana tiempo para intentar ordenar el desquicio de la macroeconomía porque nunca pasó que, en un debate de esta importancia, no se trabajara al mismo tiempo con los senadores nacionales para que no haya sorpresas en la Cámara Alta cuando se debata con correcciones, rechazos o incorporaciones de artículos que terminarían por devolver la ley a los diputados para su tratamiento”.
Un debate sin fin que no se terminaría por la negativa de los funcionarios de Javier Milei para preparar “un trabajo en espejo” o una negociación paralela con los senadores que responden a los intereses provinciales y a los gobernadores de turno.
Y, ese es el Talón de Aquiles expuesto del proyecto de Javier Milei.
El Presidente cumplió con su palabra al recortar los fondos que, usualmente, reciben las gobernaciones por fuera de los impuestos coparticipables.
Milei sigue recortando fondos a las provincias
La amenaza expuesta a la prensa por un exintegrante del Gabinete nacional del presidente a los gobernadores, “los voy a fundir a todos, los voy a dejar sin un peso” se está realizando sin concesiones.
En el primer mes del año, el monitor fiscal provincial, registró una caída interanual, con respecto al mismo mes del año 2023, del 98% en las transferencias no automáticas a las provincias.
Mientras que las transferencias automáticas del Estado a las provincias subieron en enero a 2,29 billones de pesos.
A pesar de esa “montaña de dinero”, lo recibido es inferior al año pasado en términos reales por la inflación acumulada durante doce meses.
En ese contexto, si los funcionarios de la Casa Rosada logran sacar adelante la votación en particular de Diputados, en el Senado todo comienza de nuevo, “arranca desde cero”, explican los asesores de un legislador con tonada de las sierras.
Los asesores de los legisladores oficialistas consultados son siete senadores, aseguran que “el debate va a ser más áspero que en Diputados porque hay temas que importan directamente a las provincias”.
En la Ciudad de Buenos Aires, cerca de Jorge Macri no saben cuándo el gobierno de Javier Milei va a restituir los fondos por el traspaso de la seguridad que ordenó la Corte Suprema de Justicia en un fallo reciente.
En la provincia de Misiones, el lobby para voltear el único artículo que quedó del capítulo fiscal de la Ley ómnibus beneficia a las tabacaleras multinacionales en detrimento de la industria nacional, según expresaron cerca de los senadores de la provincia de la “tierra colorada”.
En Córdoba, mientras tanto, no descartan, junto a los representantes entrerrianos continuar con la presión por la coparticipación del impuesto PAIS.
Los integrantes de las oficinas presupuestarias de las dos provincias se reunieron para elaborar un plan B que podrían esgrimir en cualquier momento para alterar los nervios del oficialismo.
El gobernador cordobés, Martín Llaryora, que se posiciona públicamente como el defensor del interior productivo del país, aprobó la propuesta de coparticipar el 21% del tributo, que se ha convertido en el que más recaudó durante 2023, el 9% para el Registro Nacional de Barrios Populares en Proceso de Integración Urbana (ReNaBaP), un organismo que reúne información sobre los 6.467 barrios populares del país, y el 70% restante de los fondos para el Tesoro que, por ley, debe fondear a la ANSeS y al PAMI (INSSJP).
El secreto para evitar tensiones sociales como se observan en las calles lindantes al Congreso Nacional pasa por alcanzar mayorías entre oficialistas y aliados.
Sin embargo, por estas horas la relación entre los gobiernos provinciales y el nacional es de desconfianza y, sólo se sostiene, por la decisión popular reflejada en la última votación presidencial de no retornar a una era kirchnerista.