El mosquito Aedes Aegypti es el que transmite el dengue y es uno de los más comunes en las zonas urbanas ya que se reproduce en lugares hogareños donde se acumula agua estancada.
Mientras que el mosquito Aedes albifasciatus es el que transmite la encefalomielitis equina y que en las últimas semanas comenzó a darse a conocer por su contagio a seres humanos.
En esta ocasión dicha especie se crea en espacios rurales producto de las intensas lluvias. Los experto señalan que este mosquito pica fuerte porque está acostumbrado a alimentarse de bovinos, animales que tienen un cuero resistente.
“A diferencia del mosquito que nosotros tenemos acá en la ciudad, en nuestras casas, que es el Aedes aegypti, que transmite el dengue, chikungunya y otras virosis, este es un mosquito charquero que molesta mucho y es agresivo”, explicó a Noticias Argentinas el ingeniero zootecnista, Guillermo Pedro Mariategui.
Especialistas señalan que el mosquito que transmite la encefalomielitis equina “deja una huella más reconocible por la intensidad” y que puede picar a través de la ropa. Caso contrario sucede con el Aedes aegypti que tiene menos potencia y necesita el contacto con la piel del humano.
La marca que deja sobre la piel el mosquito del campo es más rojiza y de tipo roncha, cuando el urbano es una picadura común a la de cualquier mosquito.
Otra de las señales a tener en cuenta es que el Aedes aegypti es negro con manchas blancas, mientras que el Aedes albifasciatus es marrón.
Fuente: Noticias Argentinas