Una vez más, tal como se analizó tras las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), el candidato presidencial de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, volverá a mostrar que en Misiones sus votos son propios y -tal vez en este balotaje- en una ínfima porción inducida por espacios como el PRO, el puertismo y un sector del radicalismo.
A pesar de la movida mediática en la que el senador nacional Humberto Schiavoni y el exgobernador Ramón Puerta por el macrismo, intentaron mostrarse como los referentes misioneros del candidato libertario, la mala imagen y los pocos votos obtenidos en las últimas elecciones provinciales y legislativas hicieron naufragar la estrategia para posicionarse con Milei.
A una semana de la segunda vuelta presidencial, después de un calendario que tuvo cuatro visitas a los cuartos oscuros, como nunca ocurrió desde la vuelta de la democracia en estos 40 años, un candidato con chances de llegar a la Rosada no visitó en campaña la provincia de Misiones.
A pesar de las cuatro décadas pasadas, siguen frescas en la memoria de muchos de los que las vivieron las visitas y los actos políticos que pudieron hacer Raúl Alfonsín, Carlos Menem, Néstor y Cristina Kirchner, Mauricio Macri, Fernando de la Rúa, Eduardo Duhalde, por citar a algunos de los que han venido a la tierra colorada a conocer las demandas, el potencial y el trabajo de los misioneros para sus mandatos.
Sin embargo, el diputado libertario no pudo ser traído siquiera para una conferencia de prensa, una caminata por algunas de las principales ciudades a fin de tomar contacto con los vecinos, especialmente en una provincia que lo tuvo como claro ganador en las PASO y, con menor caudal de votos, en la primera vuelta del 22 de octubre.
En ese sentido, al no haber un claro referente misionero con diálogo directo con Javier Milei, tampoco es posible saber las razones por las cuales el presidencialista no quiso (o no pudo) incluir a Misiones en su recorrido de campaña. Es que muchos de los que ostentan ser “libertarios”, hablan con Carlos Kikuchi, con Karina Milei o Guillermo Francos. Pero nadie está autorizado a hablar por el candidato nacional en la provincia.
Si hubiera visitado la costa del Uruguay, ¿seguiría pensando igual sobre la ruptura de relaciones con Lula Da Silva? Si viera el rol de la UNaM o la Universidad del Alto Uruguay en la formación profesional y técnica de los misioneros cuyos padres en muchos casos trabajan de sol a sol para asegurarle una profesión a sus hijos, ¿seguiría pensando igual sobre los vouchers para la educación? Si conociera que los hospitales más importantes de la provincia hoy dan mayor respuesta (y gratuita) que los sanatorios, ¿avanzaría con la salud arancelada?
Si viera que la yerba mate es considerada por CONINAGRO (integrante de la Mesa de Enlace del campo) como la única en situación de prosperidad por la regulación que ejerce el INYM y permite precios mayores a los fijados en los laudos recientes con pagos acordes al contexto económico, ¿seguiría influenciado por Alfredo Schiavoni o Pedro Puerta para eliminar una herramienta como el INYM que se construyó con un tractorazo de productores que vendían sus chacras por poco dinero ante la falta de rentabilidad?
Son preguntas que hoy no tienen una respuesta tras el contacto directo con la realidad misionera. Tal vez justamente esa estrategia es la que llevó a miles de misioneros a elegirlo en las urnas y no el voto antiperonista o en castigo al gobierno de Alberto Fernández. O porque considera que las opiniones de los misioneros mencionados como parte de su sector son suficientes para fijar una postura política.
Pero, por el momento, son puras suposiciones. Porque Javier Milei decidió no visitar Misiones, no charlar mano a mano con sus votantes o con quienes no piensan igual para escuchar otras voces con fundamento ni dar una entrevista a un medio de comunicación misionero para referirse a todos estos temas que hacen a la vida cotidiana, como el empleo, la inflación, las exportaciones, la producción y tantos otros temas que le son afines por su formación académica.
Un discurso unificado: unidad y sin grieta
Por última vez antes del balotaje, Sergio Massa pasó por Misiones. Encontró esta vez, a una renovación unificada detrás de su candidatura presidencial, encabezando el acto en Posadas el propio líder del espacio, Carlos Rovira, con Oscar Herrera Ahuad, Hugo Passalacqua, Carlos Arce y Lucas Romero Spinelli, además de intendentes actuales y electos; legisladores con mandato y ganadores de las últimas elecciones; entre otros.
Hubo una coincidencia en los discursos de Massa, Rovira y Herrera: la necesidad de la unidad nacional y el terminar con las diferencias políticas que separan y no ayudan a la paz argentina. “Acá está el elixir que cura la grieta, porque la tienen todos los misioneros, entendiéndonos, trabajando todos los días sin quejarse, pero llamando al otro, ‘traé tu idea que es bienvenida’. Ese es el elixir moderno que hoy quisiéramos compartir con nuestros visitantes”, manifestó el exgobernador renovador.
Del lado de Rovira hubo un pedido de cumplir con la palabra empeñada sobre la creación del Área Especial Aduanera. La respuesta fue que en 2024 estará funcionando (si es electo presidente, claro). “Él va a decidir con el compromiso que hoy tiene que hacer con los misioneros, de hacer con la pluma delicada y firme de la Presidencia, ese decreto, esa plataforma que va a dar justicia a las injusticias. Es ese espacio diferencial distinto porque Misiones lo es, es una provincia singular (…) No hay otra igual en el país. Por eso desde aquí queremos producir, comerciar, fabricar todo lo que sea, no con migajas sino con lo que merecemos, un esquema competitivo que solo se puede dar aquí”, enfatizó el titular de la Legislatura misionera.
Del lado de Herrera hubo un reclamo por el alto costo de la tasa aeroportuaria que se cobra en Iguazú, siendo la más onerosa de la región (comparada con los países del Mercosur), que “espanta” a las aerolíneas que podrían venir del extranjero a la ciudad de las Cataratas. La respuesta del también Ministro fue a favor de bajarla.
Según pudo saber PRIMERA EDICIÓN, entre mañana y pasado se reunirá la Administración Nacional de la Aviación Civil (ANAC) que dirige Paola Tamburelli, para tomar una decisión en ese sentido.
De los empresarios, Massa recibió un panorama crítico del presente económico, las restricciones a las importaciones, la falta de políticas que fomenten la producción y el empleo. Sin embargo, el candidato tocó la “médula” del sector comercial al hacer notar que si ganara su contrincante, los “Ahora” dejarían de existir con apoyo millonario de la Nación.
Massa asumió más promesas que anuncios. Pero fue Rovira el que marcó la diferencia con Milei, durante su discurso, al destacar que el tigrense haya llegado a escuchar los reclamos in situ y no desde la Ciudad de Buenos Aires.
“Queremos decir con toda claridad que no nos sentimos integrados los misioneros, ni en nuestra historia que siempre ha sido mezquina y esquiva, ni en las concreciones. Estamos lejos de un concepto de país integrado y dinámico y donde cada uno de ustedes valgan lo mismo. Esa es la principal tarea pendiente”, le dijo en la cara Rovira a Massa.
En la sintonía entre Massa y la renovación, Oscar Herrera Ahuad estará hoy entre los asistentes al último debate entre el Ministro y el libertario, si este último no se baja del encuentro previsto para esta noche. Son muchos los analistas que coinciden en que Milei no perdería mucho al no presentarse al debate que obliga la ley electoral, ya que el voto “anti” es difícil de revertir contra Massa. A lo sumo, podrían ser más los que voten en blanco, anulen o se ausenten.