Luego de cinco audiencias en el Tribunal Penal 1, ayer martes se cerró la etapa de recolección de pruebas en el juicio contra Juan Gastón Brunner (31), por el siniestro vial en el que murieron Susana Prestes (41) y Oscar Meza (57). Declararon las últimas víctimas y peritos. Este miércoles serán los alegatos y se conocerá la sentencia.
Tal como se hizo en la víspera, los jueces Viviana Cukla, Ángel Dejesús Cardozo y Gustavo Arnaldo Bernie, se valieron de la videoconferencia para que declararan dos testigos que no podían asistir a la sala por problemas de salud. Era el matrimonio que aquel 13 de febrero de 2016 circulaba en el Volkswagen Gol Country que impactó contra el Ford Fiesta que antes había sido chocado por el vehículo de Brunner.
En primer término la fiscal Patricia Clérici le preguntó a Olga Argüello qué recordaba de ese día. “Ibamos de Garupá hacia Posadas, hacia nuestra casa. Yo miraba hacia el costado y en ese momento escuché una explosión grande. Cuando observé para adelante ví un auto que estaba encima nuestro. Sentí mucho dolor y después ya no me acuerdo más nada“.
“¿Qué consecuencias físicas o psíquicas tuvo por ese accidente?”, preguntó la fiscal. “No me quiero acordar porque me hace mucho mal. Me costó dos meses volver a caminar. No podía salir a la calle, todo me daba miedo“, dijo con la voz entrecortada.
Seguidamente el defensor Cristian Bareiro le preguntó a qué velocidad circulaba el esposo. “Veníamos despacito porque habíamos empezado a circular después de la luz del semáforo. Cuando me di cuenta vi un auto como que voló“, recordó Argüello.
“A consecuencia del hecho, ¿usted le inició juicio al señor Brunner?”, preguntó Clérici. “Nada. Nuestro seguro dio quiebra. El abogado que nos representaba dijo que no había posibilidad de nada“.
Seguidamente la fiscal le preguntó a Ricardo Ramos si recordaba a qué velocidad iba y cómo fue el momento previo al siniestro. “Recuerdo que era un día lindo. Fui el último en pasar la fila del semáforo. Iba a una velocidad de entre 30 a 40 km/h cuando de golpe vi una sombra que se cruzó. Frené instintivamente. Escuché una explosión y vi un automóvil invertido. Enseguida me ocupé de atender a mi señora“, contestó Ramos.
“¿Cuáles son las consecuencias en su salud?”, preguntó Clérici. “Tuve estado depresivo, fobia medio, no pude trabajar más prácticamente y quedé mal psicológicamente. Todavía estoy mal“.
Luego prosiguió el defensor con las consultas pertinentes. “¿A qué distancia circulaba?”, “Más o menos a unos 30 o 40 metros“, respondió. “¿Llevaba colocado el cinturón de seguridad?”, “Sí, hasta ahora tengo los dolores en el pecho“.