Las repercusiones negativas continúan luego de que el pasado jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dio a conocer los resultados del crecimiento del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que en diciembre fue del 5,1% mensual y cerró el 2022 con una suba del 94,8%, a nivel nacional.
A contramano del malestar generalizado, en el Gobierno nacional hubo quienes “festejaron” no haber llegado a la estimación de tres cifras que habían realizado consultoras privadas, incluso las consultadas por el Banco Central de la República Argentina en su encuesta REM.
En ese sentido, Gabriela Cerruti, la portavoz del Ejecutivo, consideró que pese a que la inflación de 2022 escaló a su número más alto en 32 años, “el objetivo se está cumpliendo” a nivel económico.
“El objetivo de Sergio Massa (ministro de Economía), que se planteó (cuando asumió), era que la inflación no fuera a fin de año de tres dígitos y que se planteara una reducción de un dígito cada 75 días”, remarcó Cerruti.
Opiniones en Misiones
Ante esto, PRIMERA EDICIÓN consultó a representantes de diferentes cámaras de comercio de la provincia.
Así, Carlos Dieterle, integrante de la Cámara de Comercio e Industria de Eldorado (CACIEL), comentó: “Creo que al decir que llegamos a un 94% de inflación anual, puede ser que sea cierto en Buenos Aires, pero nosotros en el interior siempre tenemos dos o hasta cinco puntos porcentuales más arriba, de forma mensual, en el tema inflacionario”.
“Cualquier producto que en Buenos Aires sufre una suba de un 15% ó 20%, a nosotros nos llega con un 25% al 35% más en el costo. Además sufrimos el tema de que debemos pagar el flete, y estamos a 1.200 kilómetros de Buenos Aires”, detalló.
Por ello, manifestó: “La Argentina no es solamente Buenos Aires. Seguramente ahora le pasa lo mismo a la gente que está en Salta, Jujuy, Chubut, y Tierra del Fuego, por ejemplo”.
“Cuando las cosas llegan, el costo que tienen es algo terrible. Entonces el tema inflacionario se debe analizar en todo el país. Cada provincia tiene un determinado ajuste económico que a veces no se mide”, cuestionó.
Dieterle también sostuvo que “a mi entender, para los misioneros creo que se ha superado el 120% o el 125% de inflación durante el 2022. Me parece que este gobierno lo que hace es disfrazar un poco algunas ‘mentiras piadosas’, por decirlo así, como para que no le sigan pegando tanto. Pero en realidad los que trabajamos en la calle todo el tiempo sabemos muy bien los números, y vemos que es grave el problema que tenemos, que nunca es tan real el porcentual de aumentos que anuncian en Buenos Aires con lo que pasa en el interior de la Argentina”.
Además opinó que “uno de los temas que hace que se dispare la inflación galopante e inatajable que estamos sufriendo, es la cuestión de darle tanto a la ‘maquinita’. No podemos generar un dinero genuino si todo el tiempo estamos emitiendo dinero, y encima tampoco son capaces de apoyar a nuestras empresas, nuestras Pymes, para que no decaigan”.
“La presión fiscal que tienen (las pequeñas empresas) es terrible, y todos están arañando y buscando de qué manera seguir porque la inflación nos complica a todos los que estamos trabajando. Por ello es difícil pretender dar un trabajo genuino, de la manera legal que corresponde, si la presión fiscal que tenemos es terrible. Eso es algo que no será tan fácil de solucionar”, criticó.
Dentro de eso complejo contexto aseguró que “este gobierno nacional no la tiene clara y no sabe para qué lado agarrar. Tendríamos que tener gente de trabajo en la parte de administración del país para que realmente se genere ese empuje que necesitamos las Pymes, con la idea de poder seguir trabajando y sosteniendo a los empleados. El dinero no le alcanza a nadie por la inflación. Es imposible poder ahorrar porque la inflación consume todo durante el año”, apuntó.
Por su parte, Sergio Guelman, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Posadas (CCIP), indicó que “el impacto más grande, por donde se lo mire, que podemos tener en toda la economía es por la inflación”.
Así, planteó que la suba del IPC “es devastadora para el poder adquisitivo en general”, restando posibilidad de tener previsibilidad, y complicando el trabajo en las empresas donde no se tiene precios de referencia.
Al mismo tiempo enfatizó: “La economía hace mucho tiempo que viene muy convulsionada. Pero es lamentable que el Gobierno se ponga contento y que festeje que no se haya llegado al 100% de inflación anual. Eso es paupérrimo. Demuestra que el trabajo que se viene haciendo es muy insensible, es incorrecto, no están siendo competentes”.
“No tenemos ninguna previsibilidad de crecimiento si sufrimos este tipo de tasas de inflación. Los diferentes sectores, principalmente políticos, se tienen que poner de acuerdo para activar políticas de largo plazo, y que no sean solamente los parches que circundan en nuestra economía, porque eso tiene un enorme impacto en lo económico y social”, añadió.
En la misma línea, consideró que “es un manifiesto muy grave que prácticamente se festeje que no se llegó al 100% (de inflación), porque si se hacen bien los números seguramente se verá que la inflación anual superó el 100%”.
“Las estadísticas marcan que el porcentaje, según lo demuestra el INDEC, no llegó al 100%, pero entendemos que esos números es muy probable que no sean reales, y que la inflación sea mayor que eso. La realidad es muy preocupante. Esperamos que este año la inflación baje, pero por ahora no hay ninguna noción de que esto vaya a mejorar. Con el cepo a las importaciones y la complejidad que tiene la economía, no denota que tengamos un escenario mejor”, analizó.
A su turno, Carlos Mielniczuk, vicepresidente de la Cámara Regional de Industria, Producción y Comercio de Oberá (CRIPCO), subrayó que “es una locura, porque hace al menos 30 años que no teníamos este nivel de inflación. Decir que es un objetivo cumplido, o algo bueno no haber llegado al 100%, es algo muy malo en cuanto a la determinación de los objetivos. Tener una inflación tan alta es siempre algo muy perjudicial, porque altera todo el sistema económico y el poder adquisitivo de la gente”, amplió.
También recordó que la escalada inflacionaria “perjudica siempre al que menos tiene, a aquellos que destinan la mayor parte de sus ingresos al consumo y no tienen capacidad de ahorro. Le pega a los que menos tienen. Retrasa siempre, porque el salario o los ingresos vienen cada vez más atrás de los gastos”.
“Es lamentable que se llegue a estos niveles de inflación, y es algo que tiene que ver con la política económica de gasto público muy elevado, y no manejar adecuadamente un montón de factores económicos”, finalizó.