Este lunes, en las calles céntricas de Garuhapé se vivieron momentos de tensión ayer por un enfrentamiento entre vecinos, con apoyo del Municipio, y manifestantes del movimiento “Teresa Rodríguez” (MTR) que cortaban avenidas en reclamo de tierras. Hubo momentos de forcejeos y amenazas con garrotes para que los manifestantes abandonen la ciudad.
Finalmente, los vecinos, comerciantes, municipales y camioneros, cansados de los cortes, echaron a los piqueteros de la ciudad y se armó el debate, con voces a favor y en contra de la medida implementada este lunes al mediodía.
Los referentes dialogaron con FM 89.3, la radio de PRIMERA EDICIÓN a quien brindaron una radiografía económica y social de los manifestantes que fueron a reclamar y terminaron huyendo de una turba embravecida que los presionaba para que abandonen Garuhapé. “Se estigmatiza a la gente pobre que fue a pedir un pedazo de tierra para vivir”, dijeron.
“Creo que tenemos que analizar cuál es la situación social de miles de familias en nuestra provincia y en el país. En primer lugar, la falta de trabajo y en segundo la falta de vivienda digna“, comenzó a decir Mazacote quien pidió “pensar cómo salimos de la crisis”.
“Hay dos o tres generaciones dentro de una misma familia que no conocen un recibo del suelo. Los movimientos piqueteros hemos reclamado trabajo cada vez que nos manifestamos y hasta ahora no nos han dado una salida colectiva. Los planes sociales que otorga el Gobierno Nacional siempre se enmarcan en un programa donde sus beneficiarios trabajan, es decir tienen una tarea que deben cumplir: atender un merendero, limpiar la calle, trabajos de carpintería, herrería y también costura. Yo no puedo condenar a la gente que sale a la calle por necesidad para pedir cosas“, remarcó.
“Aspiramos a que el gobierno, tome grandes medidas para que tengamos trabajo y un pedazo de tierra para poder trabajar y vivir”.
“La violencia no resuelve los problemas”
Fabricio Tejerina, referente de Libres del Sur, se mostró en abierta oposición a las manifestaciones de violencia y remarcó que de esa forma “no se resuelven los problemas de la gente”.
“Hace unos meses en un piquete camionero, hubo enfrentamiento entre ellos y mataron a un camionero, entonces esa situación que no es solamente organizaciones sociales”, aclaró consultado sobre si se llega a la mencionada situación por causa del hartazgo social.
“Si vemos los datos del INDEC hoy cerca del 40% de la población argentina está en la pobreza. Si tomamos a los los chicos menores de 18 años, casi el 56% está debajo de la línea de la pobreza, podemos decir que es una olla a presión que en la actualidad se encuentra contenida por los Potenciar Trabajo, algo que a fines de los ’90 y principio de los años 2000 no había y que por ello pensamos que no ocurren cosas peores”, analizó.
“La gente cuando está mal se organiza y busca soluciones de diferentes maneras, entonces la herramienta de protesta es el corte, como lo hizo la Policía en su momento con los acuartelamientos o los docentes quienes hace algunos meses cortaron las rutas”, recordó.
“Pero más allá de esa situación, la clase dirigencial debe entender que tiene que gobernar para todos los argentinos. El problema es este Gobierno que está más preocupado por sus amigos sojeros y del FMI que por la realidad de millones de argentinos”, criticó.
“Hoy la necesidad es tan grande que se mezcla todo todo. Hay gente que piensa que con violencia se va a solucionar algo, pero la verdad es que eso sólo nos puede llevar a un destino bastante más complicado. La mayor insensibilidad es la de los dirigentes y de la clase empresarial que no ver esta realidad que golpea y muy fuerte”.
“Vivimos en un país que produce alimentos para 400 millones de personas en el mundo e internamente tenemos 15 millones chicos que nos comen todos los días. Entonces esa insensibilidad que tiene que ver con nuestra dirigencia política es lo que complica la situación. Los garrotes y los palos no nos van a llevar a nada bueno”, finalizó.
“Preocupa mucho que se pretendan resolver los conflictos sociales de esa manera”
Por último, Tato Zeretzki, docente y dirigente del Partido Obrero expuso detalles sobre el ataque ocurrido en Garuhapé.
“Un compañero de esta organización me contó que estuvieron en una reunión con el intendente y demás funcionarios municipales. Cuando terminó el encuentro y salían de la municipalidad este grupo armado los atacó”.
“Me llama mucho la atención lo organizado que estaban todos los que fueron a pegarles porque todos tenían barras de metal de dimensiones muy similares, era como que estaba todo muy organizado. Eso no fue espontáneo“, aseguró.
Y remarcó: “A mí me preocupa mucho que se pretendan resolver los conflictos sociales de esa manera. Me parece que el canal correcto era el diálogo”.
“En el lugar había policías como para evitar situaciones de violencia, así que me parece que si esa es la vía que van a implementar este los intendentes ante el conflicto social, vamos a un escenario de una escalada que puede terminar muy mal”, dijo.
Enfatizó Zeretzki: “Alguien puede reaccionar y eso puede terminar de la peor manera. Nosotros no estamos de acuerdo con hechos violentos. En el caso del Polo Obrero nunca vamos con palos, no vamos encapuchados y nunca hemos protagonizado hechos violentos. Para nosotros esa no es la vía. Deben consensuar mesas de diálogo entre los funcionarios y los referentes de las organizaciones y discutir los problemas que existen en cada lugar. Tratar de encontrarle una salida porque de otra manera vamos a una situación que puede puede escalar de la peor manera”.
“Pero la verdad que organizarse con barras de metal para atacar a otras personas físicamente cuando salían de una reunión no me parece que resuelva nada. Todo lo contrario”, insistió
“Hay un malestar generalizado. No solamente los pobres la están pasando mal también las clases medias están viendo mermar sus ingresos por este proceso inflacionario. Esto genera toda una situación de malestar social, pero la verdad que irnos por ese camino me parece que no es una salida. Hay grupos aquí en la zona que se están organizando desde hace un tiempo con declaraciones que son realmente temerarias, sectores de productores que hablan de ir al choque físico contra las organizaciones sociales o quienes se manifiesten. Si se toman decisiones de ese tipo y después termina mal se tendrán que hacer cargos los que tomaron este tipo de decisiones porque están hablando abiertamente. No me parece la vía”, volvió a decir
“En el caso del Polo Obrero cortamos la ruta en marzo cuando acompañamos la lucha docente y una más hace tres meses. No es que estamos cortando la ruta todos los días, me parece que hay un mensaje muy mal intencionado que baja desde algún sector que busca generar un clima de crispación social”.