Tras los alegatos de este lunes, el juez Correccional y de Menores 2, César Giménez condenó a Adrián Alberto Krutki (36) a cinco años de prisión efectiva por conducir en estado de ebriedad y matar a Gisela Lorena (32) y Cergio Ferreyra (12), el pasado 11 de diciembre de 2011.
El magistrado escuchó a las partes y fijó la pena de cinco años, pena solicitada por la fiscal Amalia Spinatto por “doble homicidio culposo en concurso ideal” estipulado en el artículo 84 del Código Penal, quien además pidió la misma cantidad de tiempo de inhabilitación para conducir a Krutki. Sin embargo, la justicia le prohibió por 10 años conducir cualquier tipo de vehículo automotor.
Asimismo, la querella representada por la abogada Margarita Beltrametti, solicitó la misma pena que la fiscalía, pero de prisión inmediata para el acusado por haberse escapado del siniestro en el que murieron madre e hijo y por ocultar pruebas.
En tanto que la defensa del encartado había pedido tres años de prisión en suspenso.
“Hay que hacerse cargo de las cosas que uno hace”
Rosa Ferreyra, madre y abuela de las víctimas fatales, conmovida todavía por el fallo habló con PRIMERA EDICIÓN, donde apuntó contra el acusado y los conductores que manejan en estado de ebriedad y que, como en este caso, provocaron una tragedia irreparable para la familia Ferreyra.
“Uno no puede estar conduciendo en estas condiciones. Tome conciencia de que está poniendo en riesgo su vida y la de otras personas como el caso de Lore y Cergio”, dijo.
En esa línea y con lágrimas en los ojos, expresó que “ellos pobrecitos venían de la virgen de Azara; Cergio fue a hacer una promesa porque el lunes tenía un examen y este tipo venía de un club, borracho como una cuba. Hay que hacerse cargo de las cosas que uno hace”.
Siniestro fatal y dolor
El domingo 11 de diciembre de 2011, cerca de las 20, Gisela y su hijo Cergio circulaban en motocicleta por la ruta provincial 1, tras haber estado visitando el panteón de la Virgen Inmaculada Concepción en Azara, cuando fueron atropellados por un vehículo marca Ford Escort. Ambos perdieron la vida.
De acuerdo a lo que denuncian los familiares en aquella ocasión, el conductor del automóvil “huyó, los dejó tirados, fue a su casa, volcó su auto a propósito, después fue a ver a su abogado y a las tres horas y media de haberlos chocado se presentó”.
Cergio acababa de culminar séptimo grado en la Escuela Normal Superior Mariano Moreno y estaba preparándose para ingresar a la EPET 5 de Apóstoles. Además, era integrante de Gendarmería Infantil. En tanto que su madre, Lorena, de 32 años, había sido candidata a concejal en las últimas elecciones, por el sublema del Frente Renovador. Era muy conocida además por su apego a las actividades solidarias y su adoración por los animales. Además de Cergio, Lorena tenía otro hijo, Ezequiel, quien quedó al cuidado de su abuela Rosa.