Militantes y simpatizantes del Frente de Todo desde hace varios días llevan adelante una vigilia para apoyar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner luego de que el fiscal Diego Luciani pidiera para ella una pena de 12 años de prisión y la inhabilitación perpetua para ocupar cargo.
Esta tarde, una multitud había sido convocada en un principio a reunirse en el Parque Lezama, pero luego de enterarse que el Gobierno porteño decidió instalar vallas alrededor de la casa de la expresidenta ubicada en Recoleta, las organizaciones decidieron trasladar la manifestación hasta ese punto de la ciudad.
Pasadas las 17:30, comenzaron a registrarse los primeros momentos de tensión e incidentes. Casi 20 horas después de que se montara el operativo de limpieza y control en la esquina del barrio de Recoleta, un grupo de militantes derribó varias vallas, lo que obligó a los uniformados a terminar de retirarlas y formar un cordón judicial para contener a la multitud.
Pese a que los miembros de la Guardia de Infantería intentaron mantener la restricción, la gran cantidad de gente presente en el lugar hizo que fuera imposible lograrlo, por lo que la militancia burló el cordón policial y pudo llegar hasta el frente del edificio en el que reside la expresidenta.
Sin embargo, en otra de las vallas la actitud policial fue diferente y procedió a utilizar el carro hidrante para tratar de dispersar a la gente.
Fuente: Medios Digitales