La región del NEA (conformada por Misiones, Corrientes, Chaco y Formosa) registró una suba inflacionaria del 7,4%, similar al nivel registrado en el total nacional. De esa manera el NEA aceleró en 2,5 puntos porcentuales respecto a la medición del mes previo y registró la mayor suba de precios desde que se empezó a medir la inflación regional (diciembre 2016).
Por su parte, el acumulado del año exhibe en la región un alza del 46,5%, el mayor a nivel histórico para el período enero-julio; y además, en la comparación interanual, la inflación en el NEA ya llegó al 72,2%, siendo no sólo la más alta del país, sino también un récord histórico para la región, según destacó la consultora Politikon Chaco, en un informe publicado en base a datos del INDEC.
Entrevistado por FM 89.3 Santa María de las Misiones, Alejandro Pegoraro, director de la consultora Politikon Chaco, comentó sobre los productos alimenticios que más aumentaron en el NEA que “hay dos que tuvieron un crecimiento mensual muy importante, superando el doble dígito, como el ‘aceite, grasas y manteca’ que creció por encima del 16%, y también lo que tiene que ver con ‘azúcar, dulces, chocolates y golosinas’ que creció 12,1%. Son los dos rubros que tuvieron un mayor crecimiento”.
“Después tenemos un tercer, cuarto y quinto rubro que crecieron por encima del nivel general regional, y que preocupan un poco más en términos de su importancia para la canasta dentro del hogar de consumo. Uno es el ‘pan y cereales’ que subió 8,4%; seguido por ‘café, té, yerba y cacao’ que creció 7,6%; y ‘leche y productos lácteos’ que llegó a +7,5%”, detalló.
“En la otra punta, en lo que se puede considerar lo menos negativo, se ubicó la carne que dentro de los alimentos fue el rubro que tuvo el menor incremento, de +4,3%”, sostuvo y aclaró que “pensar que el alimento que menos crece supera el 4% mensual es una prueba fehaciente del problema que estamos atravesando, lo cual golpea y diluye cualquier tipo de recuperación económica y pulveriza el poder adquisitivo de la gente”.
Al mismo tiempo comentó que “en la comparación interanual, lo que tiene que ver con azúcar pasa a ser la primera, de mayor crecimiento, con el 94,6%. Mientras que en segundo lugar queda el aceite con el 92,5%. Y el pan sigue tercera con 85,5% de incremento”.
Sin embargo, Pegoraro remarcó que “por supuesto que el rubro alimentos es muy importante, porque dentro del índice de precios que se elabora a nivel regional y nacional es el que tiene el mayor peso. Pero cuando se analizan los desempeños y comportamientos de los diferentes rubros y categorías de precios, se observa que hay otros que están creciendo más allá de que los alimentos también están subiendo de una manera muy importante”.
En ese sentido, indicó: “En el caso de julio, particularmente, tuvimos en el NEA una inflación del 7,4% que además es la más alta a nivel histórico desde que se mide la inflación en la región, mientras que los alimentos crecieron 6,6%. Es un aumento muy fuerte considerando también que es algo que golpea directamente a los hogares, principalmente a los más vulnerables de menores ingresos”.
“En la inflación interanual, que se mide de un año contra el otro, alimentos (con +73%) crece un poco por encima del nivel general regional pero por delante hay otros dos rubros que son ‘prendas de vestir y calzado’, que se ubica segunda en la región con 91,3% de crecimiento acumulado interanual”, describió y añadió: “Desde el 2019 hay una política de fuerte protección a la industria nacional de los textiles, eso repercutió de manera positiva en término de generación de nuevos puestos de trabajo pero no se pudo contener la cuestión de los precios. Por eso vemos que este rubro es el primero, cuando se lo observa dentro de las otras regiones agrupando todos los resultados, que desde la hiperinflación supera el 100% de inflación interanual”.
Además, dijo que “esto nos lleva a pensar que ‘alimentos’ es lo más importante dentro del IPC por su impacto social pero no es el único rubro que explica toda la dinámica y el comportamiento de precios restante. Por ende, no debe ser lo único en lo que el Gobierno debe focalizarse creyendo que una baja o un control sobre el rubro de alimentos implicaría una solución al problema inflacionario general”.
En relación al rubro que más creció en julio pasado, comparado con el mismo mes del 2021, expresó que “fue ‘restaurantes y hoteles’ que en el NEA llega a un incremento del 92,9%. El dato es alarmante pero hay que recordar que fue el sector que más tiempo estuvo restringido por la pandemia. Su normalización genera que el incremento de los precios sea muy duro. La tendencia que está mostrando en los últimos meses muestra que está desacelerando ese crecimiento, parece ser que ya se concretó el grueso más importante de esta corrección de precios propio de una actividad que estuvo muy frenada”.