En pocos días se reunirán funcionarios nacionales, gremios y representantes de las cámaras empresariales para analizar el regreso a los edificios de las firmas comerciales, teniendo una dosis de vacuna contra el coronavirus.
Cabe recordar que en Argentina la aplicación de cualquiera de las vacunas contra el coronavirus es voluntaria. Sin embargo, hay gobernadores que decidieron volverlas obligatorias.
En el ámbito público, Córdoba que es gobernada por el peronista Juan Schiaretti anunció que serán licenciados sin sueldo aquellos trabajadores de la provincia de Córdoba que se nieguen a recibir la vacuna contra el coronavirus y tengan 60 años y/o comorbilidades.
En Jujuy, gestionada por el radical Gerardo Morales, la Legislatura respaldó con el voto del oficialismo un decreto del Ejecutivo provincial, que dispone la obligatoriedad de la vacunación contra el coronavirus para la totalidad de los estatales. Quien no acredite haber recibido al menos una dosis, no podrá asistir a prestar servicios en su lugar de trabajo y “la inasistencia será considerada injustificada y se le descontará la remuneración por día no trabajado”.
En Misiones, por ahora, el gobernador Oscar Herrera Ahuad determinó que los mayores de 60 años (con o sin vacunas) deberán volver a sus lugares de trabajo luego de un año y medio de teletrabajo por ser considerados grupos de riesgo. Hasta el Superior Tribunal de Justicia, por la presión que ejerció el Colegio de Abogados, determinó el viernes pasado que los trabajadores volverán en su totalidad a los despachos.
Claro que, mediante certificado médico, seguirán exceptuados los que tengan enfermedades de base especialmente determinadas para continuar aislados.
Entre los sindicatos misioneros, si hubiera una consulta sobre qué hacer en la provincia, hay unanimidad de criterio en la no afectación sobre los salarios en aquellos que deciden no vacunarse. Aunque el titular de la CGT Misiones, José Milciades Giménez, se mostró a favor de una vacunación obligatoria de los trabajadores.
No se trata solamente de un debate argentino o exclusivo de la tierra colorada. El viernes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) expresó que no aprueba una vacunación obligatoria en ningún país. Sin embargo, Italia fue el primer país que obligó a sus sanitarios a inmunizarse, así como los profesores. En Francia se hizo con los médicos. En Reino Unido y Grecia los empleados de las residencias de ancianos también deben portar la vacuna si quieren seguir trabajando. En Estados Unidos es obligatoria para los trabajadores federales.
En el mundo científico se abrió por ello el debate sobre qué tan cerca o lejos estamos de conseguir una inmunidad y evitar la multiplicación de cepas o variantes cuando hay países donde un alto porcentaje de su población no acepta inocularse.
El Olivos-gate
En el “albertismo” se siguen preguntando quién filtró la foto del escándalo que evidenció el doble discurso y la falta de ética presidencial frente a la pandemia, en la etapa más dura del aislamiento obligatorio que determinó Alberto Fernández y que incumplió el mismo mandatario y su grupo más cercano con un festejo de cumpleaños de la Primera Dama.
Trascendió que la primera reacción de CFK vía telefónica, habría sido solicitarle al Presidente que admitiera su culpa y pidiera disculpas, lo que sucedió en un acto oficial horas después que el escándalo estaba desatado y mientras la oposición tomó el mismo como “bandera” para pedir el juicio político de Fernández, del cual no hay chances de aprobarlo sin que existan votos del mismo Frente de Todos.
¿Hubo una sola reunión que violó el ASPO de 2020? Al parecer no, habría sido más de una y habría una evidente intencionalidad en quien tiene en su poder fotos comprometedoras para el Gobierno nacional, en hacerlas circular a “cuentagotas”.
En la alianza gobernante no pasó inadvertida la crítica que lanzaron dirigentes y periodistas muy cercanos al kirchnerismo contra Alberto Fernández, Fabiola Yañez (que transcurre el fin de semana largo en Posadas, tras su llegada ayer a Iguazú para acompañar a su pareja en el lanzamiento del PreViaje nacional).
Tan fuerte se sintió el “golpe moral” en el Gobierno que el comentario de ayer en el hotel seis estrellas ubicado en el Parque Nacional Iguazú fue “el bajón” que tenía Alberto Fernández por la crisis en medio de la campaña electoral.
Lo compararon con el duro momento que también vivió la Casa Rosada con el “vacunatorio VIP”, que logró ser zanjado con la salida del entonces ministro de Salud Ginés González García. ¿Y si hubo un vacunatorio VIP en Olivos también en paralelo cuando había escasas dosis de vacunas? En ese caso, Fernández no podrá culpar a Fabiola y nadie se podría imaginar que el “fusible” ante la sociedad sea el propio jefe de Estado.
En el Instituto Patria ya estarían elaborando un esquema de gestión poselectoral, promoviendo un fuerte recambio en la primera línea del Gobierno. Ya no se trataría de los cuestionamientos a algunas figuras (Matías Kulfas, Santiago Cafiero, Alexis Guerrera, entre otras que no responden al kirchnerismo / camporismo) sino a sus “padrinos políticos” como el propio Alberto o el diputado Sergio Massa.
Finalmente, en el oficialismo nacional buscan terminar de entender cuán conflictivo resultará la decisión de renunciar a su banca de Facundo Moyano, uno de los hijos del histórico líder camionero. Abunda la incertidumbre respecto a una “reacción en cadena” de los sindicatos que fueron relegados por la Rosada en el manejo del poder o de la distribución de los recursos a las obras sociales. Decisiones por las que responsabilizan exclusivamente al Presidente y que los llevaron a buscar refugio en la Vicepresidenta de la Nación.
Siguen las promesas
Herrera Ahuad, considerado por Alberto Fernández “uno de los gobernadores más demandantes que tiene el país”, le reclamó al propio Presidente que compense a Misiones por el sostenimiento de las grandes superficies que mantiene de bosques nativos y selva. Desde antes de asumir en 2019, el misionero le viene pidiendo lo mismo y siempre existe un gesto político de decir “debemos hacerlo”, pero no se concreta.
Ayer se sumaron un inicio a modo de prueba piloto, con limitaciones y protocolos, de la apertura del puente entre Iguazú y Foz para permitir la entrada del turismo internacional que puede dar oxígeno al sector de la ciudad de las Cataratas. Sin embargo, más allá que otra vez Fernández dio un apoyo en el discurso, habrá que enfrentarse a la ministra Carla Vizzotti que llevó adelante las limitaciones a los vuelos internacionales y los cupos para el regreso al país de los mismos argentinos.
Ya en privado, el Gobierno de Misiones le habría reclamado a Fernández que se firme lo antes posible el acuerdo entre la Provincia y ANSeS por dos mil millones de pesos que se adeudan a la caja del IPS desde 2018, al no haber sido transferida.
El Presidente habría prometido destrabar el tema la semana próxima y hasta pedido estar al momento en que Fernanda Raverta y Herrera suscriban el pacto.