Este martes 1° de octubre, Posadas celebra el tradicional “Karaí Octubre” en los comedores comunitarios de la ciudad. Este evento cultural y gastronómico se realizó en 80 comedores de la capital misionera, gracias a un esfuerzo conjunto entre el Ministerio de Desarrollo Social y el Gobierno de la Provincia de Misiones. Según Gustavo Antúnez, encargado de la Cocina Central del barrio Santa Rita, la iniciativa buscó llegar a la mayor cantidad de personas posible en este día especial.
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“Venimos haciendo un conjunto el Ministerio de Desarrollo Social acompañado por el Gobierno de la Provincia de Misiones, donde tratamos de llegar a todos nuestros comedores de Posadas. Tenemos 80 comedores diarios donde cocinamos de lunes a viernes con 120 personas trabajando en conjunto a partir de las 5 de la mañana”, explicó Antúnez. Durante la jornada, se prepararon 30 ollas de yopará, un plato tradicional de la región, con cada olla rindiendo aproximadamente 160 raciones de comida.
La demanda en los comedores ha ido en aumento, y en palabras del encargado: “La verdad es que en este último tiempo, hablando con los encargados de los comedores, vimos que la demanda se incrementó entre un 40 y hasta te diría un 50%”.
El evento del 1° de octubre, sin embargo, no solo se enfocó en la entrega de comida, sino también en homenajear a las personas detrás de las cocinas. “Arrancamos bien temprano con una iniciativa del Ministro de Cultura en conjunto con el Ministro de Desarrollo Social para agasajar a nuestras cocineras. Trajeron un grupo de chamamé para homenajearlas y bueno, hasta salió un baile y todo”, comentó Antúnez, destacando el valor de los trabajadores que hacen posible la alimentación comunitaria.
Blanca, una de las cocineras del lugar, compartió su experiencia en la preparación del menú especial para la jornada: “Pusimos a hervir el poroto con el locro y le agregamos las verduras que lleva. Pusimos mucho puchero, porque generalmente eso va con mucho puchero. Cada uno le puede agregar lo que quiera; lleva todas las verduras y la mandioca le da el sabor especial. Hoy le agregamos chorizo para que le dé el toque especial”. Blanca también destacó la importancia simbólica del evento: “Tenemos que ahuyentar el diablo este mes, que venga abundancia para nuestro mes y para los meses siguientes”.
La satisfacción del equipo de cocina no solo se mide en la cantidad de raciones servidas, sino también en la alegría de saber que su labor llega a muchas personas que lo necesitan. “Ya estamos acostumbrados. Ya es algo que nos gusta hacer, especialmente pensando en que cada comedor va un niño a retirar su táper de comida y estamos contentos con nuestro trabajo porque nos gusta cocinar para todos”, agregó Blanca.