El hackeo a cuentas de Whatsapp sigue más presente que nunca y en crecimiento. Solo que esta vez golpeó a un grupo con vulnerabilidad en su salud, al apoderarse los delincuentes del Whatsapp de una administrativa de un reconocido centro privado de tratamiento del cáncer en Posadas.
La empresa en cuestión, ubicada en avenida Roque Pérez, evitó realizar declaraciones ayer sobre la cuestión y sus representantes prometieron dar hoy información, mediante un representante administrativo, ante el requerimiento de aclaraciones por parte de este Diario.
Sin embargo, PRIMERA EDICIÓN pudo saber que el primer Whatsapp hackeado habría sido de una mujer, para poder llegar finalmente a los contactos de la misma, entre los que figuran los pacientes con cáncer que se tratan en el lugar.
En ese sentido, PRIMERA EDICIÓN supo que una licenciada en Administración de Empresas de 65 años se presentó el pasado miércoles 31 de julio alrededor de las 15 horas en la Seccional Primera de la capital misionera.
Le contó a la Policía que “le hackearon su teléfono celular, mediante la aceptación de un link que recibió, tanto en su teléfono particular, como en el Whatsapp de su trabajo sito en Av. Roque Pérez casi Junín – Centro Oncológico-, y están pidiendo trasferencias de dinero a todos sus contactos”, según consta en la denuncia.
Alertados por familiares y amigos que eran contactados a su nombre para pedir dinero, se cree que utilizaban el vínculo de salud para engañarlos.
En un primer momento, se pensó que el teléfono hackeado pertenecía al Instituto Misionero del Cáncer del Parque de la Salud. Pero no fue así, la confusión se generó ya que varios de los afectados con esta maniobra, son pacientes derivados a la radioterapia privada para sus tratamientos oncológicos por el sector público.
Hasta ayer se desconocía la cantidad de personas que pudo haber caído en esta maniobra, especialmente porque sus seres queridos creyeron que efectivamente se trataba de fondos necesarios para solventar los tratamientos de los pacientes en una condición difícil socioeconómica, a partir de su enfermedad.
Todo parece indicar que algunos de los contactos a quienes escribieron los delincuentes, habrían llegado a transferir dinero.
A pesar de la información se siguen sumando víctimas
En una reciente entrevista con FM 89.3 Santa María de las Misiones, el fiscal de Instrucción René Germán Casals había advertido que “el número de denuncias de este tipo de delitos es muy grande. Esto cambia todo el día, la metodología, la forma, quiénes son las víctimas”, aseveró el funcionario judicial.
“La habilidad de los delincuentes para ocultar su identidad y operar desde el anonimato de un chip comprado en un kiosco complica la identificación y persecución de estos crímenes”, marcó el fiscal.
Posteriormente, el entrevistado enfatizó la importancia de la educación y la precaución. Entre los consejos, recomendó a los ciudadanos desconfiar de “ofertas demasiado buenas para ser verdad” y verificar la reputación de las empresas o vendedores antes de realizar cualquier transacción. Además, sugirió utilizar plataformas de pago seguras que ofrezcan garantías y evitar compartir datos personales por canales no oficiales.