Luego de 32 años de servicio en el sistema educativo, el 1° de junio la docente Rosario Anahí Schmidt recibió su jubilación.
“Ahora disfrutando mis vacaciones de largo tiempo, es decir, de mi hermosa jubilación, muy tranquila y contenta”, compartió Rosario en diálogo con PRIMERA EDICIÓN.
Egresada de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales, ejerció como profesora de Matemática, Física y Cosmografía del nivel secundario hasta sus 59 años. Comenzó trabajando en el Colegio Nacional N°2 “Gral. Manuel Belgrano”, que luego paso a ser de la provincia, y en el BOP N°36, en los cuales se desempeñó hasta finales del 2023.
“Siempre me hizo muy feliz”
“Cuando me recibí pensé que iba a cambiar el mundo y cuando empecé a trabajar me choqué contra una pared. En el día a día quizás uno no lo siente con todo lo que hay que atender, pero el tiempo te termina demostrando que sí, que, desde el pequeño lugar de cada uno, una puede cambiar las cosas”, reflexionó Rosario.
“Para mí fue un privilegio poder estar frente a las aulas todos estos años, siempre me hizo muy feliz”, agregó y señaló que lamentablemente no es la misma suerte con la que corren otras personas trans o de la comunidad LGBTIQ+ para quienes es complejo ingresar al sistema educativo.
“A mí me ayudó un montón el hecho de haber estado dentro del gremio y ya ejerciendo cuando decidí hacer mi transición, eso me dio más peso y valor, y también por mi forma de ser, yo tengo mucho carácter y defendí mi derecho, lo hice valer”, enfatizó Rosario.
“Hay mucha hipocresía, siempre esperan que una esté con la cabeza agachada, pidiendo por favor las cosas y es injusto que las oportunidades no sean las mismas”, añadió.
Cambio de identidad
Rosario decidió llevar adelante su cambio de identidad de género en el año 2012, luego de la sanción a nivel nacional de la Ley de Identidad de Género.
Fue la segunda persona dentro de la provincia en realizar este trámite, Vanesa Morel, profesora de inglés, también oriunda de Posadas, fue la primera.
“Cuando yo hablaba con Vanesa, le decía, ‘cuando nosotras hagamos el cambio ya no vamos a poder volver para atrás, porque es una cosa que comenzamos y hay que seguir para adelante y seguí siempre para adelante”, señaló.
“Antes de hacer mi transición le hablé a mi compañera de trabajo y le dije que, si el hecho de llevar adelante mi cambio de identidad de género me iba a generar conflicto, yo no tenía problema en renunciar al cargo que tenía, y me dijo que no, que no renuncie”, contó.
Schmidt compartió que ella siempre se auto percibió mujer, “una siente que está en un cuerpo que no es lo que una quiere ser, pero me tenía que adaptar a vivir en esa circunstancia”, recordó.
“Cuando trabajaba en el BOP N°36 mis alumnos me decían que, si me auto percibía mujer porque no iba vestida de mujer, que me animara, yo siempre tuve muy buena relación con ellos”.
En ese sentido, Rosario señaló que “los adultos son mucho más homofóbicos que los jóvenes. Los docentes también son muy homofóbicos, yo tuve muchos problemas, pero yo desde el principio les puse el puntito sobre la i y les dije ‘yo soy docente, cuál es el problema’”.
“Me exigían el doble”
Sin embargo, remarcó que el temor a que “me echen o corran” siempre estuvo presente.
“A mí siempre me exigían el doble porque no podían creer que yo podía ser docente. Eso fue un problema con mis colegas pares docentes porque todo el tiempo estaban cuestionando lo que yo sabía o cómo hacía las cosas, entonces siempre busqué nivel para arriba”, manifestó.
“La sociedad es muy prejuiciosa y ¿cuál es el prejuicio hacia una trans? Pensar que solo puede vivir o trabajar de la prostitución, las personas piensan que no tenemos capacidad, y yo no solo fui docente, también fui gremialista en la UDPM”, señaló.
“Fue muy chocante, muy duro, es como que a todos les sorprendía, me decían: que vas a ser vos profesora y ¿acaso necesito andar con el título abajo del brazo para que me crean?”, subrayó Rosario.
Hoy por hoy, Schmidt contó que tiene todo a su nombre, “incluso mi título de docente cambié a mi nombre justamente para no tener problemas absurdos dentro de la legalidad”.
“Hasta ahora hice cambio de identidad, recién ahora voy a empezar a hacer toda la hormonización plena definitiva más para mí, no para el mundo”, finalizó.