Una crisis interna en uno de los sectores del Partido Libertario misionero terminó el jueves en un abrupto cambio de funcionarios al frente del PAMI Misiones. El médico Paulo César Zárate Ninamango fue desplazado a pedido de la profesora Ninfa Alvarenga, quien lo había promovido para tal función, y la propia dirigente libertaria se convirtió en su reemplazante en la UGL del Instituto Nacional de Servicios Sociales que sigue intervenido por la Nación desde hace muchos años.
Zárate Ninamango no llegó a cumplir cuatro meses de gestión al frente de la obra social estatal para jubilados y pensionados de ANSeS en la tierra colorada, donde ingresó a mediados de febrero pasado a propuesta de Alvarenga y el apoyo político de Karina “El Jefe” Milei.
Desde hace varias semanas, corrieron fuertes versiones de diferencias profundas internas entre el médico especialista en Administración y Gestión de Servicios de Salud de la Universidad Favaloro y la profesora diplomada en Economía Austríaca en Instituto Universitario ESEADE.
A tal punto que Zárate Ninamango se habría tomado unas vacaciones apenas ingresó al PAMI Misiones, para intentar descomprimir la situación de tensión interna con su jefa política.
Ahora, por primera vez desde la asunción de Javier Milei en la Presidencia de la Nación, Alvarenga se convirtió en funcionaria nacional al frente de un importante organismo social.
¿Habrá ajuste?
Conocida la novedad, el titular del gremio UTI PAMI, Carlos Valenzuela, habló con FM 89.3 Santa María de las Misiones y canal 9 Norte Misionero. Dijo que no fue tanta la sorpresa del cambio porque “la verdad que ya han ocurrido en otras provincias también unos cambios así, bruscos, en corto tiempo. Así que por ahí ya estábamos atentos a que podía pasar acá también como en Mendoza o Quilmes”.
Más allá de los funcionarios políticos, Valenzuela sostuvo que “el PAMI, en realidad, los que manejan y hacen que funcionen, los que llevan adelante la institución son los trabajadores. Este muchacho (por Zárate Ninamango) recién estaba aprendiendo lo que es la institución y bueno, vino el cambio. Y te digo más, hay mucha gente, muchos funcionarios que salen, incluso de tres o cuatro años de gestión y no lo terminan de conocer. O sea, da una idea que no es fácil la tarea de gestionar una obra social tan importante como es el PAMI”.
Respecto a la posibilidad de un ajuste en la cantidad de empleados en Misiones, a partir de la llegada de Alvarenga, el titular de UTI PAMI admitió haber escuchado la versión sobre ese objetivo de la “motosierra” libertaria. “
“Sí, sí, comentarios siempre hay, siempre ha rumores. Obviamente que nosotros no vamos a estar de acuerdo con ningún tipo de despido que haga de trabajadores, a los que atienden al jubilado, a los que tienen la camiseta del PAMI. Nos parece que eso no debería suceder. Pero bueno, este tipo de modalidad lo implementó justamente la gestión pasada (en referencia a la camporista Marcela Krechuska que estuvo hasta diciembre de 2023). Ustedes se acordarán que ni bien ingresó la gestión anterior despidió a 4 o 5 compañeros, hicimos todo lo que teníamos que hacer y algunos tuvieron que recurrir a la Justicia, algunos se recuperaron, otros no”.
Luego dijo: “No creo que venga con la intención de despedir gente porque bueno, nos parece mal que vaya a suceder eso. Sí necesitamos gente que ingrese”.
El dirigente sindical anticipó que pedirán una audiencia con Ninfa Alvarenga y el planteo que llevarán a la misma es que “en primer lugar no se toque al personal que trabaja dentro del Instituto, sea cual fuere la época, el tiempo que haya entrado y que esté trabajando, que no lo toquen. Y vamos a brindarle el apoyo para tratar de cambiar las cosas que por ahí se pueden hacer mejor, pero le vamos a marcar las cosas que pueda errar”.
Para Carlos Valenzuela, “ el Instituto creo que tiene que mejorar mucho más en auditoría. Hace unos años, la función del PAMI pasaba todo por la auditoría. Nosotros auditábamos las farmacias, auditábamos los sanatorios y eso a través de las distintas gestiones se fue quitando. Hoy tenemos el problema de, por ejemplo, los sanatorios que le dan turno de dos o tres meses para atender a los jubilados, por ahí algunas cosas que no se pueden resolver y eso, la única forma de solucionar es auditando. O sea, hay que profundizar en ese sentido para tratar de mejorar la institución”.
El recorte social
El titular de la UTI PAMI, Carlos Valenzuela, admitió que el recorte de gastos no podría pasar por las prestaciones médicas a los afiliados porque están al mínimo. Sin embargo, sí se podrían afectar las acciones sociales que realiza el Instituto.
“El PAMI es la única obra social en el mundo, creo, que se ocupa muchísimo de la parte social. Acuérdense que nosotros tenemos centros jubilados donde funcionan los comedores, funcionaban los bolsones y talleres. Dentro de esos centros de jubilados se promueven acciones de prevención para la salud física y mental del jubilado, y ahí tenías miles de actividades que se podían hacer y no llegar a un geriátrico, a un sanatorio. Incluso hay convenios con la universidad para que sigan estudiando, infinidad de cosas que por ahí mucha gente desconoce. Pero bueno, seguramente el recorte presupuestario va a pasar por ahí, porque en la parte médica está al mínimo”, explicó el dirigente.
Problemas con unidades geriátricas con cobertura
Se planteó a Carlos Valenzuela del gremio UTI PAMI por qué razón hay pocas unidades geriátricas que aceptan afiliados.
“Lo que pasa es que hay muy pocos lugares donde se pueden internar, hay una necesidad tremenda en esta problemática. Entonces, una cuestión es que no hay casi lugares, y otra que es cierto, el Instituto tiene requisitos muy rígidos para incorporar un prestador. Eso también hace que dificulte el ingreso a los geriátricos. Estas son las cosas que están surgiendo y van a surgir con estos recortes presupuestarios que por ahí pueden llegar a haber, porque ¿dónde se va a recortar la parte del presupuesto? En la parte médica ya no lo pueden hacer porque está al mínimo. Entonces, ¿dónde lo van a tratar de hacer? En la parte social”, sentenció.
Finalmente, se refirió al edificio que se alquila teniendo uno propio por calle Entre Ríos. Valenzuela aseguró que la propiedad del PAMI Misiones “por falta de mantención, decayó. Se hicieron algunos arreglos y se guardan elementos ahí, creo que hay gente trabajando también. Pero sería un buen proyecto uno nuevo. Arreglar, ya no va más, debería tirarse abajo”, sugirió.