El comportamiento de un gato puede parecer sumamente aleatorio e impredecible. Sin embargo, hay patrones que se repiten y que dan un marco lógico a las acciones de estos pequeños felinos.
La ciencia ha estudiado el motivo por el cual los gatos piden comida a pesar de tener su plato lleno. Este comportamiento, según las investigaciones, no es un mero capricho, sino que tiene una fundamentada razón de ser.
¿Por qué tu gato pide comida con el plato lleno?
Existen diversas razones por las cuales un gato puede pedir más comida aun cuando el plato se ve lleno a simple vista. Estas razones están relacionadas con la anatomía de los gatos, en particular, con sus bigotes.
Sensibilidad de los bigotes
Los gatos poseen una gran sensibilidad en los pelos más grandes, largos y gruesos que tienen en las cejas, bigotes y cerca de sus patas. Esta sensibilidad puede hacer que, al chocarse con los bordes del plato, les resulte molesto y no puedan seguir comiendo, aún teniendo el plato lleno. Este fenómeno es conocido como “fatiga de los bigotes”. Los bigotes son extremadamente sensibles y están conectados a nervios, por lo que cualquier presión o contacto constante puede causarles incomodidad.
Soluciones prácticas
La mejor solución para este problema es cambiar el recipiente que utilizan para la comida y reemplazarlo por uno más holgado y que se adapte mejor a las necesidades del animal. Un plato más ancho y menos profundo permitirá que el gato pueda comer el alimento ubicado en cualquier parte del plato sin que sus bigotes choquen con los bordes.
Comida fresca
Otra razón por la cual un gato puede quejarse de tener el plato lleno es que la comida lleva mucho tiempo servida, lo que el gato puede interpretar como que está poco fresca.
Los gatos son animales muy exigentes con la frescura de su comida. Para evitar este problema, se recomienda acostumbrar al gato a comer raciones más pequeñas y servirle comida fresca en intervalos regulares. Esto evitará que la comida pase mucho tiempo en su plato y pierda su frescura.