La ciudad capitalina ultima detalles para el 39 operativo de Levantamiento de Índices Rápidos de Aedes aegypti (LIRAa), con una visita programada a cerca de 14 mil hogares posadeños. Al tener un importante número de casos de dengue en el país, las autoridades sanitarias están atentas a la presencia de potenciales criaderos, sobre todo teniendo en cuenta que Posadas superó una marca histórica en el porcentaje del último LIRAa del 2023, con un 15% en algunos sectores de la ciudad.
En comunicación con PRIMERA EDICIÓN el director de Vigilancia y Control de Vectores de la Municipalidad de Posadas, Fabricio Tejerina, explicó que, entre los operativos pautados, “por el tema de los casos de dengue que hubo a partir de diciembre no lo pudimos hacer y el que correspondía a marzo también se nos pasó un poco por la situación epidemiológica de la ciudad, la provincia y el país”.
El próximo LIRAa en Posadas se hará del 22 al 27 de abril, para ello se encuentra en capacitación el personal técnico para constatar la presencia de larvas de Aedes: “El objetivo es llegar a más de 6 mil casas”, precisó. En el último operativo, el 11% no permitió el ingreso al hogar, en un 46% fue efectivo el control y en un 43% no había nada en el domicilio o eran terrenos baldíos.
Con el mapeo previsto, las visitas se programan teniendo en cuenta los datos del estudio y los lugares donde han detectado un porcentaje elevando en los índices. Al respecto, Tejerina detalló que los datos venían siendo altos en la parte sur, pero en septiembre del año pasado “cuando comienza la primavera y las condiciones climáticas son favorables para el desarrollo del mosquito, vimos que empezaron a aumentar también en la parte norte de la ciudad”. Entre ellos, mencionó sectores con valores altos como la zona Quaranta hacia el oeste, Villa Cabello y Santa Rita, el sector noreste.
En materia de análisis, señaló que en el último LIRAa en Posadas “en el porcentaje de viviendas donde encontramos larvas de mosquitos fue de un 11,9%, es decir, de cada 100 casas en casi 12 había larvas”. En esos domicilios con presencia de Aedes, en casi un 15,7% detectaron criaderos.
Teniendo en cuenta los datos de otras épocas, aseguró que estos números “fueron un poco más altos que el promedio histórico (2015), por un invierno suave y la población que permite criaderos de mosquitos”.
En otros puntos, indicó que los únicos sectores con números más bajos de presencia larvaria se encuentran en la zona centro, el área de la chacra 32-33, Itaembé Miní Oeste e Itaembé Guazú. Sin embargo, aclaró que “el mosquito Aedes aegypti lo encontramos en todos los barrios de la ciudad, en mayor o en menor medida”. Remarcó que es un problema que escapa de los estratos sociales, donde incluso los barrios de familias con mayor poder adquisitivo “nos permiten menos ingresar, que en aquellos de clase media o baja”.
Al visitar los hogares, compartió que los principales recipientes donde se juntan agua y posibilita la presencia de larvas son: baldes o tachos de pinturas, las cubiertas al aire libre, seguido de planteras, macetas o recipientes en los patios. A pesar de que los porcentajes varían de acuerdo a la temporada y las condiciones climáticas, también “si la gente colaborara con la limpieza para evitar los criaderos de mosquitos, los índices tendrían que ser más bajos”, añadió.