Aunque a miles de kilómetros de distancia, el imparable incendio en el Parque Nacional Los Alerces, que anoche ya había consumido casi mil hectáreas y seguía “fuera de control” según reconocían las autoridades, constituye un nuevo llamado de atención para Misiones y Corrientes, una región que vivió momentos de zozobra por similares motivos durante los últimos veranos.
Después de varios meses de “tregua” a causa de las intensas y frecuentes lluvias provocadas por el fenómeno “El Niño”, la alerta en nuestro litoral se actualiza producto de las condiciones meteorológicas registradas en los últimos días y las previsiones para el futuro inmediato.
Tal y como se refleja en este mismo ejemplar, para esta semana se aguarda otro aumento de las temperaturas, con máximas superiores a los 33 grados a partir del martes, acompañados de una ausencia de precipitaciones que se extiende ya por más de diez días.
En ese contexto, crece el riesgo de incendios en la región, que actualmente es “muy alto” en 16 de los 17 departamentos de Misiones. Por ello, cabe insistir una vez más en la necesidad de que toda la población tome conciencia y no realice prácticas que puedan dar pie a desastres ambientales como los que ya vivimos y algunos todavía recuerdan vívidamente por lo sufrido en primera persona.
Hay que insistir en que la quema de pastizales, basura y otros, en patios, campos o al aire libre, debe controlarse estrictamente y minimizarse al extremo siempre; pero que hoy por hoy constituye un peligro innecesario y conviene esperar a que las condiciones sean más propicias.
En manos de todos está que no se repitan escenas dantescas como las de años anteriores y no haya que lamentar daños ambientales evitables.