Por orden del Juzgado de Faltas de turno, la Municipalidad de Posadas clausuró en la noche de ayer martes el mayorista Makro luego de la denuncia de un consumidor por presencia de plagas en la zona de exposición de alimentos. Este miércoles llegaron responsables de la empresa de Buenos Aires y se reunieron con funcionarios municipales comprometiéndose a higienizar y poner en condiciones las instalaciones para volver a reabrir cuando el Juzgado lo disponga. No hay riesgo laboral para los trabajadores, explicaron.
Este martes se hizo la constatación de funcionarios municipales en la cual encontraron rastros de la presencia de roedores y paquetes de alimentos deteriorados por el consumo de los mismos. Se labró el acta, se enviaron las actuaciones al Juzgado de Faltas desde donde se ordenó la clausura.
La directora de Bromatología de la Municipalidad, Ana María Paredes señaló hoy a PRIMERA EDICIÓN que “lo que motivó nuestra intervención en ese local comercial fue una denuncia de un consumidor por presencia de plagas. Nuestro procedimiento es constatar la denuncia con una inspección y al comprobar que las condiciones eran no adecuadas, se labró el acta correspondiente”.
La funcionaria aseguró que “vimos rastros de (roedores) y alimentos deteriorados por el consumo. No el roedor en sí, pero eso ya es suficiente para establecer que la denuncia es real”. También se habría constatado la presencia de numerosas palomas.
“Ante esa situación, por cuestiones preventivas, se hicieron actas correspondientes por contravención y se dio actuación al Juzgado de Faltas”, indicó Paredes.
Este miércoles se permitió al personal de la empresa ingresar al lugar, acompañados de funcionarios municipales, para subsanar el inconveniente y dejar las instalaciones en condiciones.
“Asumieron la responsabilidad y compromiso de subsanar todo. El personal de la Municipalidad observa las tareas operativas, y personal de la empresa trabaja en el lugar”, dijo la directora. “Cuando esto concluya y nosotros verifiquemos, se comunica al Juzgado y procederá si cree conveniente, a levantar la clausura”, especificó.
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Paredes aclaró que “no hay plazo. El plazo es el tiempo que les lleve subsanar el hecho que ocasionó el problema. Se verifica y comunica al Juzgado”.
Según la responsable de Bromatología, la situación “amerita de parte de la empresa, sus responsables, fortalecer el programa que tienen de manejo integrado de plagas, que es obligatorio, es pedido para las habilitaciones de todos locales comerciales que manipulan alimentos, es un manual que establece la gestión de control y monitoreo de plagas”.
“Cada actividad que maneja alimentos identifica sus plagas y establece procedimientos y forma operativa en que lo combate con planillas que registran el cumplimiento de su programa. Ahora se le pide mayor hincapié en el programa, fortalecer las cuestiones preventivas para que no ocurra”, dijo.
Trabajadores en alerta
El Centro de Empleados de Comercio envió una nota, por esta situación, a las autoridades de la empresa donde advirtió que “es una necesidad urgente de una gestión más eficiente de los mandos gerenciales”.
En declaraciones a PRIMERA EDICIÓN, el secretario general del Centro de Empleados de Comercio, Benigno Gómez, dijo que “hicimos llegar una nota en virtud del cuidado de la salud de los trabajadores y consumidores. Hasta tanto no haya certeza de que se corrigió la situación que activó la clausura, tenemos que esperar para cumplir nuestras tareas”.
“Algo paso, hay una falla, seguramente hubo negligencia de parte de las autoridades. Si la Municipalidad tomó esta decisión es porque se agotaron las instancias”.