Productores yerbateros viajaron a Buenos Aires en las últimas horas puntualmente por dos temas centrales. En primer lugar, apaciguar los controles por parte del Ministerio de Trabajo y comenzar a trabajar en conjunto con los productores.
También plantearon cambios en la corresponsabilidad gremial y el funcionamiento de la obra social. En medio de todo esto, ven complicada el consenso para el precio de la hoja verde y se preparan para un posible laudo.
En diálogo con Primera Plana, programa de FM de las Misiones, Jonas Petterson, director por la Producción en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), se expresó sobre estos temas y dio precisiones de la situación.
“Tuvimos una reunión con la ministra Raquel Olmos, donde planteamos la situación de la corresponsabilidad gremial, por los aumentos que se vienen dando y los servicios que cumple la obra social OSPRERA. Si bien el motivo por el cual aumentaban el convenio de corresponsabilidad, es porque faltaba dinero para que funcione todo bien, ya hace un año que se vienen dando diferentes aumentos, y la obra social de los trabajadores sigue dejando mucho que desear”, contó Petterson.
Asimismo agregó: “Por otra parte planteamos la participación de las asociaciones que somos representativas del sector dentro del convenio de corresponsabilidad, porque solamente participan las que estuvieron en el momento que se firmó el convenio. Nosotros solicitamos nuestra incorporación. No tuvimos respuesta y esperamos que se de en los próximos días”.
También mantuvieron reuniones con el jefe de inspecciones del Ministerio de Trabajo de la Nación, “el cual nos planteó que ellos las inspecciones que vienen realizando vienen trabajando con el registro de trabajadores y el estado en el que se encuentran los trabajadores, que no haya menores, y esas cuestiones”.
Ante los reiterados hechos de tensión entre productores e inspectores que se generaron debido a estas inspecciones, Peterson comentó que le solicitaron centrarse en lo preventivo, “que hagamos reuniones en la zona productora, que planteemos lo que podamos mejores, y que trabajemos en conjunto para que no sea algo tan chocante como se dio”.
Afirmó además que “la posibilidad quedo abierta a que ellos vengan y podamos hacer reuniones con productores en el sector”.
En tanto las inspecciones se siguen haciendo, y Petterson aclaró que como institución “tampoco podemos decir que le ministerio no las haga, nada mas queremos que sea un poco más flexible”. Agregó también: “Queremos que se controle lo más importante y que no vengan a pedir baños químicos y cuestiones que nosotros no podemos cumplir”.
Se define si hay precio o laudo
Por otro lado, Petterson contó que hablaron con Delfo Buchaillot, subsecretario de Agricultura de la Nación, para plasmar la situación atípica por la que atraviesan en medio de las reuniones por el precio de la hoja verde. “Nosotros planteamos la situación que hoy tenemos, si tenemos que fijar un precio, tenemos que incorporar lo que puede venir a futuro, tanto en el plazo en el que se fije este precio y la inflación que pueda haber”.
Declaró además que fueron claros ante las dos alternativas que tienen desde el sector: “O planteamos un precio que contemple todo eso, o se hace con los valores de hoy y con un incremento mes a mes, incorporando la taza de inflación de cada mes”, indicó.
Si bien aún queda una última reunión por el precio de la hoja verde, los productores “preparan el suelo” en Buenos Aires para un posible laudo. “Ellos entienden la situación, es real, pero primero tenemos que terminar la etapa que nos queda que es la negociación dentro del INYM. Si no se logra allí, volveremos a Buenos Aires a trabajarlo junto con Ministerio de Agricultura de la Nación”.
Sobre esto último, dio su punto de vista: “Si fuese la industria preferiría que los precios aumenten mes a mes y no que me digan que tenemos que tener en cuenta lo que vale la yerba de acá a fin del precio. Si arrancó a pagar hoy preferiría que fuese paulatino el aumento”.
Ante la posibilidad de evitar el laudo y definir el precio en una reunión interna, Petterson se mostró incrédulo: “Es la misma situación que siempre, no le veo mucha animosidad de aumentar el precio. No quiero perder la esperanza, espero que se solucione acá, pero hasta ahora no tenemos una oferta ni a favor ni en contra. Veremos que pasa mañana”, cerró.