“Ir compensando los daños que causó la devaluación”. Con ese argumento, tan real y necesario como la crisis misma, el Gobierno anunció una exención impositiva por seis meses para monotributistas, consciente de que el grueso de las medidas anunciadas por Sergio Massa no alcanzará a ese sector de los trabajadores del país.
Ahora bien, el titular de la AFIP, Carlos Castagneto, realizó aclaraciones sobre las medidas fiscales que anunció el domingo el ministro de Economía y a partir de esas aclaraciones se obtiene que los montos que se ahorrarán los contribuyentes de la categoría A alcanzarían para comprar un alfajor de chocolate, un litro de leche o medio kilo de yerba de acuerdo a la provincia en la que resida el monotributista.
Compensar el daño de la devaluación para le escala más chica del monotributo equivale entonces a menos de una merienda. El Gobierno sigue, como desde el inicio de la gestión, improvisando medidas que ensanchan la distancia que mantiene con la sociedad.