Dos exintegrantes de la división Investigaciones de la Unidad Regional X declararon ayer ante el Tribunal Penal 2. Fueron citados para explicar su labor el día de la muerte de la docente Mirta Carmen Rosa (47) en el barrio Los Potrillos de Garupá.
Diez años y seis meses después del crimen lo único que dejaron en claro fue su fragilidad de memoria y lanzaron polémicas versiones que solo sirvieron para remarcar que pudieron haber rescatado a la mujer que padecía esquizofrenia porque informaron, sin dejarlo escrito, que uno de sus compañeros vio deambular a una mujer que coincidía con las características de la víctima en el mismo barrio donde fue hallada sin vida con traumatismo de cráneo y rostro, estallido de vejiga y múltiples lesiones en el cuerpo.
El subcomisario Emilio Federico Broemser (39) y el sargento José María Bernal (43) fueron llamados como testigos para explicar su desempeño respecto a su jurisdicción y funciones el día del deceso. El fiscal Vladimir Glinka le exhibió los libros de guardia, tanto de la comisaría Quinta de Garupá como de su dependencia en la UR-X en el barrio A4 de Posadas. Y contrastó con ellos, versiones distintas a las labores que cumplieron junto al suboficial Adrián Borda (quien declararía hoy).
Bernal aseguró que la mañana del 14 de febrero de 2013 se trasladaron a Garupá para retirar de su celda a un joven conocido como “Chinito” y que les indicara dónde y a quién había entregado elementos robados.
Aseguró no vio a la víctima cuando fueron al barrio Los Potrillos, a las 14 aproximadamente. Su compañero Borda en cambio, dijo en el expediente que fue a las 16 y Broemser, a su turno, resaltó ayer que esto ocurrió a las 15.
Lo curioso es que en los registros firmados, el oficial a cargo de la patrulla de la brigada, Broemser, sostuvo que a esa hora fueron al barrio Madariaga en la zona Sur de Posadas pero a muchos kilómetros de Los Potrillos. Fue aún más sorprendente en el debate, cuando Glinka le mostró el libro y solo remarcaba no recordar tal informe.
Situación similar expresó Bernal quien apuntó culpas al “cabo actuante” encargado del libro de guardia. “Ellos a veces se equivocan”, dijo el funcionario público.
Resulta llamativo que ninguno de los horarios coincida, más aún porque la primera testigo en declarar ayer ante los jueces Gregorio Augusto Busse, César Antonio Yaya y Fernando Luis Verón (por subrogancia), fue Mariela Benítez, vecina que socorrió a Mirta Carmen Rosa en su domicilio entre las 12 y las 13 y la contuvo hasta que llegaron en una patrulla Aníbal Aldo Gabriel Villalba (36) y Luis Albino Rotela (44) los efectivos de guardia de la comisaría Quinta y hoy acusados por “abandono de persona agravado por el resultado muerte, incumplimiento de deberes y falsedad ideológica”.
Benítez ratificó su declaración de 2013: “Estaba en mi casa (calles Santo Pipó y Alba Posse) cuando veo que bajaba corriendo una mujer y entra desesperada a mi casa y no hablaba, solo repetía que venía de San Javier. Despierto a mi esposo que estaba descansando antes de salir a trabajar a un aserradero cerca. Cuando ella lo vio a mi marido le pedía que no le hiciera daño. No sabíamos quién era, nos pidió agua y le di también un pedazo de pan. Mientras tanto le pedí a mi pareja que busque a la policía y él se fue en moto a la Quinta. Ella no paraba de temblar y tenía mojada y sucia la ropa en la espalda y cola como que se había caído. Estaba descalza pero tenía marcas de ojota”.
Además contó que “cuando llegó la camioneta con la policía les pedí que la llevaran al hospital para que la revisaran”.
El subcomisario Broemser manifestó que “a las 17” les avisaron que en el barrio Los Potrillos habían hallado un cuerpo. “Fuimos hasta ese lugar de nuevo y nos encontramos con Fernando Castelli (exjefe de la Secretaría de Apoyo para las Investigaciones Complejas, SAIC) y le contamos que mi compañero vio a una mujer con vida que deambulaba por la zona y coincidía con las características y pensamos que fue una muerte natural”.
También señaló: “Hablé con Villalba (acusado) esa tarde y él me dijo que estaban tranquilos con el procedimiento”.