La Junta de Clasificación y Disciplina y el Consejo General de Educación (CGE) siguen sin responder por la enorme cantidad de reclamos por no cómputo de valoración de los docentes que aprobaron la diplomatura superior “Diseño y Aprendizaje Universal” y los cursos de “Alfabetización digital para la gestión escolar en las instituciones educativas y docentes” y “¿Cómo gestionar la calidad en el proceso de enseñanza y aprendizaje en la modalidad E-Learning?”.
Estos reclamos se generaron porque la Junta no otorgó el puntaje establecido por Decreto 744 (3 puntos para la diplomatura y 60 centésimas por curso) a los docentes que aprobaron esta capacitación ofrecida por el Instituto Freire de Jardín América y que, por convenio con el Sindicato de Educadores Misioneros Alfredo Bravo (SEMAB), se ofreció durante 2021 y 2022 sin costo a los afiliados de ese gremio.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, la secretaria general del SEMAB, Mariana Lescaffette, recordó que los sindicatos no pueden dar cursos por lo que en 2020 firmaron un convenio con el Instituto Freire para poder ofrecer a sus afiliados esta capacitación gratuita como servicio.
“El proyecto fue presentado en 2020 para desarrollarlo en 2021. Ese primer año, no hubo problema con la valoración de los cursos y la diplomatura. Según el Decreto de valoración 744, la diplomatura otorga 3 puntos y los cursos 60 centésimas cada uno. En total 4,20 puntos. Cuando nuestros afiliados aprueban la diplomatura reciben un certificado con sello y logo del SEMAB y la firma del Instituto Freire”, contó.
Valoración según el docente
La dirigente señaló que el problema surgió en 2022, “cuando sin mediar ningún planteo formal, la Junta de Clasificación y Disciplina dejó de valorar la capacitación. Lo que hicieron es muy arbitrario: a los que están en padrón de mayor jerarquía solo le valoraron la diplomatura pero no los cursos, a los que no están en padrón de mayor jerarquía le valoraron los 4,2 puntos. Pero también hay casos de docentes a los que no se le valoró nada”.
Lescaffette indicó que el tema ya está judicializado porque el Instituto Freire presentó un recurso de amparo. “Estoy esperando que me llamen como testigo, voy a llevar todas mis pruebas… porque acá hubo una irregularidad muy grande de parte de la Junta y del Consejo General de Educación que está haciendo dormir el expediente, ni siquiera sacó un dictamen favorable o desfavorable. Hicimos denuncias formales ante la Junta y ante el CGE, la Junta nos ignoró y pasaron los meses; entonces presentamos un recurso de revocatoria al CGE y Alberto Galarza (presidente del organismo) tomó ese recurso y sumó al que presentó el Instituto Freire”.
Según advirtió, “no puede la Junta valorar el mismo curso y diplomatura de una manera diferente según el docente: dándole a algunos el total del puntaje, a otros menos y a otros nada”.
Irregularidades en los legajos
Lescaffette aseguró que el mismo sistema digital que les permite a los docentes ver sus legajos les permitió “ir documentando las irregularidades… por ejemplo, a una colega del nacional le valoraron los 4,2 puntos en diciembre pasado por la diplomatura y cursos; en marzo le bajaron el puntaje, le volvieron a subir en abril y otra vez le bajaron en mayo”.
A su entender, “los cambios que se hicieron en la Junta solo fueron el resultado de una pelea de un sector para quedarse con los negocios de los que se fueron. No tengo pruebas pero es lo que pienso”.