La Justicia encargada de investigar el millonario asalto a un trabajador de Montecarlo liberó durante los últimos días a dos hombres sospechados de asaltar a un sujeto cuando iba a depositar dinero en el banco Nación de esa ciudad, para una estación de servicio.
En su momento los sospechosos fueron aprehendidos con un rifle de aire comprimido modificado para calibre 22 milímetros.
Fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN indicaron que, desde el Juzgado de Instrucción de Puerto Rico, notificaron días atrás la libertad bajo caución juratoria y que permanecen supeditados a la causa a dos hombres detenidos desde el 3 de enero de este año.
La mención es para dos hermanos de 33 y 44 años, apuntados como los que asaltaron a un hombre de 48 años el día mencionado a las 11 a unos 20 metros de una entidad bancaria ubicada sobre avenida Libertador y cruce con la calle Herm de Montecarlo.
De acuerdo al informe sobre el asalto la víctima fue abordada por dos sujetos armados que lo amenazaron para robarle una caja en la que trasladaba el dinero de la recaudación de la estación de Servicio Shell para depositar en el banco.
Le dispararon antes de huir al menos cuatro veces, acertando uno de los disparos hiriéndolo en un pie.
Tal como se dijo en su momento, los investigadores suponen que los delincuentes hicieron inteligencia y sabían que el empleado iba a depositar alrededor de 5 millones de pesos para la estación de servicio en la que trabaja. También intentaron robarle su vehículo, pero finalmente escaparon a pie.
Las pesquisas obtuvieron resultados relativamente pronto cuando la policía halló en el barrio Martín Fierro, en el sector donde se encuentra un pinar y un arroyo, una gorra y buzos deportivos que eran similares a las prendas que vestían los sospechosos según el relato de la víctima.
Cuando promediaba la tarde de ese mismo 3 de enero, en dicho barrio detuvieron a dos hombres de 33 y 44 años. Uno de ellos llevaba una mochila en la que había un arma de aire comprimido pero modificada para que pudiera disparar balas calibre 22. A su vez tenía cuatro cartuchos.
Eso incrementó las sospechas acerca de estar ante los supuestos autores del hecho. Sin embargo, a la hora de declarar en días posteriores, los sospechosos negaron la participación en el robo y adujeron una coartada que, si bien no fue confirmada, fue fundamental para que hoy estén en libertad, aunque no desligados del todo de la investigación.
Por el momento la causa quedó sin detenidos y cabe mencionar que el dinero sustraído nunca fue encontrado.
El empleado se recuperó de la lesión a los pocos días y en su momento había relatado que los asaltantes vestían ropa deportiva y tenían acento lugareño como principales características entregadas en la denuncia, ya que mencionó no conocerlos ni haberlos visto alguna vez por la zona.