En comunicación con PRIMERA EDICIÓN la directora de auditoría farmacológica del IPS, Romina Smolarczuk, aclaró que “desde el año 2020 tenemos implementada una auditoría digital. Somos la única obra social provincial con una autorización digital de medicación crónica”.
Sobre esta herramienta, contó que “es una metodología diseñada para facilitar el acceso al paciente crónico, que tiene que llevar todos los meses la medicación. Al tener que ir a hacer la autorización en persona para su medicación, se crea un programa para que la auditoría sea digital. Entonces el afiliado envía foto de la receta por correo electrónico y se hace la autorización digital, con mi firma electrónica”.
Una vez enviada la información, indicó que “el afiliado espera hasta que la farmacia del IPS se comunique con él para avisar cuándo tiene que ir a buscar la medicación”. Precisó además que “tenemos en estos momentos 5.000 afiliados crónicos. Entre las facilidades, explicó que “es un trámite menos para el afiliado”.
Recordó que, durante la pandemia, para acceder a medicación, “el IPS tiene una receta propia, se permitió hacer recetas para prestación médica común, con formulario, porque el afiliado no podía ir hasta la obra social para sacar la orden y después ir al médico a hacer la receta. En este período de tiempo, tanto pacientes ambulatorios como crónicos, se implementó un sistema donde el afiliado le pedía al médico que hiciera una receta RP común para adquirir medicación. El médico hacía y la enviaba por Whatsapp. Esto no está vigente en el IPS desde que se volvió a la normalidad en pandemia”.
Esta modalidad sólo se mantuvo durante los primeros meses de la pandemia: “Cuando ya se pudo acceder a los consultorios de manera presencial, ya se volvió a la compra de órdenes”.
Acerca del no aceptarse recetas por foto de Whatsapp o mail, Smolarczuk señaló que ahora “para todos los afiliados de cualquier obra social, prepaga u obra social sindical ya no está más esa modalidad”.