El presidente Alberto Fernández designó a Ayelén Mazzina al frente del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación. Se trata de Ayelén Mazzina, una profesora de Ciencias Políticas, feminista y activista LGBT, que integraba la Secretaría de la Mujer, Diversidad y la Igualdad de San Luis.
Luego de las críticas de la gestión de Elizabeth Gómez Alcorta, movimientos feministas y disidentes esperan que la nueva ministra cumpla con las expectativas de reforzar políticas públicas concretas y con perspectiva de género. PRIMERA EDICIÓN habló sobre este cambio en el Ministerio con referentes sociales de la provincia.
Logros y desaciertos
La secretaria de comunicación de CTA Autónoma de Misiones, Alicia Rivas, comentó que “creemos que el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad, más allá de todo lo que le falta y seguimos reclamando, fue sin dudas una respuesta a la lucha colectiva del movimiento de mujeres y diversidades”. Sobre la elección de la ministra, indicó que “es alguien que venía trabajando en articulación con los movimientos feministas y territoriales”.
En el encuentro de San Luis, “lo que se reivindicó es que el Ministerio es un logro para defender y que debemos seguir reclamando que todas las políticas públicas, que se necesitan para implementar el efectivo cumplimiento de derechos, se gestionen con presupuesto, con trabajo con derechos”. Remarcó además que “es un Ministerio que se ha consolidado desde su creación con trabajo precario, que es algo que venimos reclamando”.
Por su parte, el docente y activista social Jorge Ríos comentó a este Diario que “la gestión de Elizabeth Gómez Alcorta tuvo varias críticas de distintos movimientos, pero de todas formas logró articular algunas políticas interesantes, específicamente dirigidas hacia las mujeres. También, se priorizó ayudas económicas para las personas trans, mientras se milita la ley de reparación histórica para las compañeras adultas”.
Respecto de su renuncia, indicó que “me parece coherente desde su perfil, al venir del lado de los derechos humanos. El feminismo y el sector LGBT plantea una intersectorialidad, donde también forma parte la opresión a los pueblos originarios, porque hubo una violación a los derechos humanos”.
Ríos señaló que es prometedora la llegada de Ayelén Mazzina “al ser la primera persona a cargo de un Ministerio abiertamente LGBT, es la más joven del Gabinete y no es de Buenos Aires. Además, ingresa una triada femenina en los ministerios”. Asimismo, “a nivel discursivo utiliza una palabra interesante: una gestión de anclaje territorial”.
Nazarena Fleitas de ATTTA Misiones y coordinadora del área de Diversidad del Observatorio de Violencia Familiar, opinó que hasta ahora “ninguna de las personas que estuvieron al frente del Ministerio fueron las correctas, principalmente para brindar respuestas en población de diversidad y fundamentalmente a personas trans”. Lamentó esto, porque “se espera mucho y que tuvieran más empatía, pero no fue así”.
Desde el Ministerio, “todo fue muy lento, incluso compañeras esperaron ayuda durante la pandemia de COVID y también los sueldos para las compañeras mayores, pero no hubo respuestas”, agregó.
Fleitas comentó que la nueva ministra, “se la conoce de San Luis y se tiene mucha expectativa al ser una persona que conoce la lucha y el sacrificio de la población, además que se mueve con compañeras trans, como la referente de INADI”. No obstante, advirtió que “lo mismo pasaba con las demás” y de momento “tenemos expectativas al ser una persona joven, pero resta esperar”.
Desde la Asociación Colectivo 108 Nicolás Pintos, destacó del Ministerio que “el año pasado aprobó más de 1.200 programas Acompañar, lo cual significa dinero para mujeres y disidencias que pasaron situaciones de violencia. Además, trajo respuestas concretas a nuestra provincia, concretamente trabajando en líneas de violencia, donde Misiones participó en distintos foros”.
Desde las disidencias, afirmó que “hay poco para destacar. En una primera instancia la provincia tuvo una reunión con la primera subsecretaria de Políticas de la Diversidad, Albarrueda, que renunció durante la pandemia, porque no había políticas pensadas para las diversidades y la mirada de la ministra Alcorta era muy binaria. Así que, en disidencias, poco y nada”.
El militante LGBT Adam Yan respondió que la creación de un Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad “nos ha dado existencia como sujetos de derechos. Es un lugar de suma importancia y que pueda mantener las políticas públicas actuales”. Entre las últimas leyes de importancia, destacó “el cupo laboral trans, así como el decreto 476/21 que da un marco legal a identidades no binarias”.
En la labor social, resaltó que “hoy vemos con preocupación la renuncia de la anterior ministra, que deja al descubierto ciertas cuestiones internas que no armonizan con lo que se intenta visibilizar desde el Ministerio”.
De ahora en más, “esperamos que sostengan, refuercen y profundicen las políticas públicas, que dependen de una decisión estatal de cumplirlas, pero también de una población empoderada que las reclame”, agregó.
En esto, “Misiones ha comenzado a aplicar la ley de empleo formal para personas trans y travestis, pero todavía queda mucho por hacer”.