El 6 de septiembre de 1930 se producía en Argentina el golpe militar del general José Félix Uriburu, que derrocó al presidente democrático Hipólito Yrigoyen. Daba comienzo así la “Década Infame”, nombre con el que el historiador José Luis Torres bautizó a esa dictadura que finalizó el 4 de junio de 1943 con otro golpe de Estado militar que derrocó al presidente Ramón Castillo.
“La crisis mundial de 1929 desatada en EEUU, cuyos efectos comienzan a sentirse en nuestro país a comienzos de 1930, será uno de los factores desencadenantes del primer golpe cívico militar del siglo XX en la Argentina“, explica Felipe Pigna.
“Los sectores dominantes lanzarán una furibunda campaña de prensa contra el gobierno de Hipólito Yrigoyen, responsabilizándolo de la crisis y haciendo hincapié en la “incapacidad”, en la “vejez” y en “la falta de reflejos” del presidente radical para afrontar los difíciles años por venir”, agrega el historiador.
Lo cierto es que por primera vez desde 1853 se interrumpía el orden constitucional. Uriburu ocupó la Casa de Gobierno como presidente provisional de la Nación, iniciando un período conocido como “década infame”, en alusión al fraude electoral y los negociados de corrupción que sellaron el período.
Este acontecimiento supuso el quiebre de la primera experiencia de un gobierno democrático en la Argentina del siglo XX, interrumpiendo lo que hubieran sido 18 años de continuidad de un mismo partido en el gobierno gestionando el Estado y acumulando poder.
El radicalismo se había convertido en una eficiente maquinaria de ganar elecciones y en este despliegue de su fuerza electoral consagró por segunda vez como presidente al enigmático caudillo que conducía el primer movimiento de masas de integración social de la Argentina contemporánea.
Con el contexto mundial de la Gran Depresión, al comienzo, y luego la Guerra Civil Española (1936-1939) y la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), la etapa se caracterizó por el fraude electoral sistemático, la represión a los opositores, la proscripción de la Unión Cívica Radical y la corrupción generalizada.
Durante este período también comenzó la migración masiva del campo a la ciudad.