Los visitantes que recorrieron en los últimos días el laberinto vegetal de Montecarlo, se encontraron con la triste realidad de un atractivo derruido, ya que fue atacado por hormigas mineras, que es una de las principales plagas de los cultivos de la provincia de Misiones.
Por el reclamo en las redes sociales de visitantes al predio del Parque Juan Vortisch, donde se encuentra este mítico laberinto, que es único en su tipo en esta parte del continente, el cual está ubicado en pleno centro de la ciudad de Montecarlo y posee una superficie de 3.100 metros cuadrados, enmarcados por 1.715 metros lineales de ligustrina, una sola salida, dos caminos y 510 esquinas ciegas, los responsables del espacio emitieron un comunicado explicando los porqué del mal estado del atractivo.
En el mismo, la Asociación Promotora de Turismo y Cultura de Montecarlo, explicó que “el laberinto vegetal no está en su mejor momento, nuevamente sufrió el ataque de hormigas mineras, que invadieron también diversos sectores del parque Juan Vortisch. Hace algunos días se puso un producto para frenar dicha invasión”.
Tal como lo manifestaron en el escrito, desde hace tiempo vienen colocando productos para mitigar y combatir esta plaga, “el efecto dura un tiempo y regresan. Es importante remarcar que el parque está rodeado por una reserva ecológica. En los próximos días volveremos a fumigar con fertilizante ecológico, pero llevará un tiempo recuperar las plantas”, adelantaron.
Además, contaron que “en octubre del 2005 se podó la totalidad de las ligustrinas, dejándolas de 20 centímetros de altura, durante la presidencia de Virgilia Aguirre y luego asume Waldemar Laumann. En el 2015, presidencia de Doris Bischoff, se volvió a realizar esta tarea para que haya una recuperación, así como curación de hongos y resolver la permeabilización de la tierra compactada en los senderos. En ese momento ya comenzaron a aparecer los hormigueros y desde ese entonces se sigue trabajando en su eliminación”.
Es importante destacar que este laberinto fue ideado en la década de 1990, por el productor orquideófilo montecarlense Guillermo “Willy” Baden, uno de los fundadores de la Fiesta Nacional de la Orquídea.
Más allá del lamentable estado en el que se encuentra actualmente el laberinto, desde la Asociación consideraron “habilitar el ingreso al parque y explicar al visitante la situación, también se informó al área de Turismo del Municipio para que advierta la situación a los turistas para que puedan optar por ir o no al atractivo”.
El predio está abierto de 9 a 12 y de 15 a 18, y se puede acceder con el pago de una entrada general de 100 pesos.
En este contexto, insistieron en la necesidad de explicar el escenario “y que no se sigan emitiendo acusaciones a la comisión por situaciones de esta naturaleza. Hay que remarcar además que, según ordenanza municipal, tampoco se puede utilizar un insecticida de etiqueta roja que podría ser la más efectiva, porque afectaría a otras especies de insectos y animales en los alrededores”.
En este sentido, la presidenta de la Asociación, Graciela González expresó a PRIMERA EDICIÓN que “se está trabajando y se están ocupando del tema, pero los resultados no son inmediatos”.