Desde que por disposición del Ministerio de Salud ya no se testea de forma pública para determinar la presencia de COVID-19, fue aprobado y comenzó a venderse en el país el Immunobio más conocido como autotest, algo que en su momento generó mucha expectativa en la población misionera que, hasta ese entonces, debía hacer largas filas para testearse. Sin embargo, al día de hoy, a pesar del auge de los síntomas respiratorios propios de la temporada de invierno y similares a los del COVID, la demanda por autotest es mínima en Posadas, por lo que algunos farmacéuticos están declinando venderlo.
Al ser consultada por PRIMERA EDICIÓN, la vicepresidenta del Colegio de Farmacéuticos de Misiones, Gily Hata, indicó que “al comienzo cuando se habían restringido los testeos gratuitos y surgió el autotest, hubo una gran demanda, pero a medida que se apaciguaron los casos, también decayó la demanda del autotest, por eso por ahí uno recorre las farmacias y no hay en stock porque directamente la gente no se acerca a comprar”.
Todo a pesar de que el Immunobio cuesta aproximadamente 1.650 pesos, la mitad que un testeo rápido de antígenos que, en la mayoría de los laboratorios, supera los 3.000 pesos. Es así que, particularmente en Posadas, algunas farmacias céntricas prefieren no renovar stock y en los barrios periféricos “muy pocas tienen, y las que tienen reportaron que no están vendiendo: compraron una tanda y, como vendieron muy poco dejaron de traer, es poca la demanda, especialmente saliendo del microcentro”, indicó.
A su vez, si bien este panorama difiere al del interior de la provincia, donde sí hay demanda, ambas se mantienen mínimas.
Ante esta situación, Hata argumentó: “Lo que sucede es que muchas personas, ante la duda de si tienen una gripe común o COVID- 19 (porque hay mucha influenza dando vuelta), al no haber servicio de testeado gratuito, no se testean y optan por comprar un antigripal antes que el autotest”.
Baja demanda de testeos
Asimismo, a la baja demanda del autotest se suma la de los testeos rápidos de antígenos en laboratorios privados, en los cuales también se está hisopando muy poco. En cuanto a eso, la presidenta del Colegio de Bioquímicos de Misiones, Liliana Benítez, explicó a este Diario que “la demanda viene muy planchada, hubo un pequeño aumento el mes pasado cuando comenzó la temporada de frío y aumentaron las enfermedades respiratorias, pero nada comparado a lo que fue el año pasado o en el verano donde tuvimos el pico de casos”.
Si bien, según Benítez, hay consultas no sólo por COVID-19 sino por influenza, que también se diagnostica mediante un hisopado que tarda y cuesta lo mismo (alrededor de 3.200 pesos), “no podemos decir un número porque es mínimo tanto en los privados como en los casos derivados del Hospital”, indicó.
Por su parte, en cuanto al motivo, la representante del Colegio de Bioquímicos coincidió con la Vicepresidenta del Colegio de Farmacéuticos, “creo que es porque la sociedad asumió el COVID-19 como una enfermedad más, como estamos vacunados el que tiene algunos síntomas lo toma con naturalidad, la mayoría está cursando como si fuera un cuadro gripal tradicional y todos aprendimos a cómo cuidarnos en el caso que tengamos y no asustarnos, ya no hay ese pánico que había antes cuando te decían que eras positivo”, explicó Benítez.
A su vez lo mismo ocurre con el testeo de influenza en el cual la demanda sigue planchada.
Registro de notificación
Uno de los marcos normativos para la venta de autotest desde el comienzo fue la notificación obligatoria de los resultados al Sistema Nacional de Vigilancia de Salud (SNVS), un método que a pesar de la baja demanda “sigue vigente y funcionando perfectamente”, explicó la vicepresidenta del Colegio de Farmacéuticos de Misiones.
Es así que la persona que se realiza el autotest debe ingresar a una página web e indicar el resultado, o bien mediante un código QR. En caso de que no lo hagan el farmacéutico, que previamente registró en el sistema los datos del comprador, debe indicar que no obtuvo datos del paciente.
“Obvio que significa un trabajo extra la carga administrativa pero bueno, somos conscientes de que es una enfermedad de notificación obligatoria y es una responsabilidad para vender el autotest”.