Con 5,3% de inflación en mayo pasado, la región Nordeste Argentino (NEA), donde se incluye a Misiones, alcanzó su techo máximo anual histórico de incremento del Índice de Precios al Consumidor (IPC) desde que comenzaron a realizarse las mediciones por regiones, en el año 2016.
En los últimos doce meses, entre junio de 2021 y mayo de 2022, los aumentos alcanzaron 61,8%, superando el récord anterior de la región que había sido desde enero a diciembre de 2019 con 57,6%.
La región más cara del país
Alejandro Pegoraro, director de la consultora Politikon Chaco, señaló que “mirando el acumulado del año, en los primeros cinco meses de 2022 las regiones están parejas, el NOA tuvo 30,4% y el NEA 29,9%. Pero en términos de pensar en escenario extendido en el tiempo, en la inflación interanual el NEA tocó récord un histórico desde que se mide por regiones”. En declaraciones a FM 89.3 Santa María de las Misiones, el economista sostuvo que “el IPC regional se empezó a medir en 2016, y en términos interanuales nunca estuvo tan alto, pasó 60 puntos por primera vez en la historia”.
“En este nivel comparativo pasó a ser la región con mayor inflación del país, algo que el NEA tuvo liderazgo durante 2019, parte de 2020 y luego en 2021 empezó a bajar. Ahora, después de un año, el NEA vuelve a liderar la suba. Este nivel de 61,8% nunca se había dado, el récord fue 2019”, recordó.
El escenario a futuro “no es para nada alentador y las proyecciones que hace el mercado hacia diciembre, con niveles de inflación de 74%, no son una locura de pensar”, remarcó.
Los productos disparadores
La división que mostró la mayor suba el mes pasado fue “Bebidas alcohólicas y tabaco” (7,8%); seguida por “Restaurantes y hoteles” (7%) y “Salud” (6,1%), destacó el director de Politikon. Analizando el comportamiento interanual, el top tres de mayores alzas está liderado por “Restaurantes y Hoteles” (81,2%), “Prendas de Vestir y Calzado” (72,4%) y “Bebidas alcohólicas y Tabaco” (64,9%). Estas tres, junto a “Alimentos y Bebidas no alcohólicas” (64,5%), son las divisiones que crecen por encima del nivel general de la región.
Aclaró Pegoraro que los rubros Salud y Alimentos golpean fuerte en el NEA al ser la región con los sueldos más bajos del país, donde las familias destinan un tercio de sus ingresos a la compra de alimentos.
“Los rubros que son sensibles a la población han tenido un crecimiento importante y se manifiesta en la calidad de vida de la gente ante incrementos que no están dando respiro”, explicó.
Una espiral regresiva
Cuando suben los precios y los salarios no llegan a crecer igual, se produce una disminución del consumo. “Una disparada inflacionaria impacta en el nivel de consumo. A partir de ahí es una espiral: cuando el consumo cae puede bajar el nivel de productividad, hay ajustes en la industria, se da un círculo vicioso donde el consumo cae, la productividad cae, los empleos se ponen en riesgo”, indicó el economista.
Actualmente, dijo, los salarios están corriendo por detrás: “Si un gremio arregló en enero un 60%, que pudieron ser muy pocos, hoy está pidiendo un incremento porque quedó 10 puntos atrás. Al caer el consumo también cae la rentabilidad de empresas”.
“El problema es que el ciudadano de a pié no tiene demasiadas herramientas para luchar con esto. Los hogares que viven al día, la única solución que tienen es buscar segundas y hasta terceras marcas para cubrir sus costos” de la canasta .
Y aquel que tiene ingresos más holgados hace “ahorro consumo, que es una contradicción, el stockeo. Hoy en lugar de comprar un kilo de yerba compro tres, es un ahorro a futuro porque me atajo con futuros aumentos. Pasa en muebles, equipamiento del hogar, electrónica”.
Pan y carnes
Los dos productos centrales en la mesa de los argentinos “justamente en mayo tuvieron crecimientos muy importantes, el pan 6,8% y carne 6,2%.
“En el caso particular del pan vemos que ya había crecido mucho en abril y marzo. Estas fuertes subas hacen que cuando agrupas todos los alimentos, vemos que el pan es lo que más creció en los últimos doce meses, 75% interanual”, dijo el economista.
“En el caso de la carne, tiene un comportamiento volátil, el año pasado se logró bajar durante dos meses, pero hoy estamos viendo las consecuencias de esa decisión anterior más el impacto del presente. No es el producto de alimentos que más está encareciendo, está en el top cinco de los que más crecen con 67% interanual, pero con la preocupación que en los últimos tres meses mostró un crecimiento importante. Nos abre una interrogante de ver si es comportamiento temporal o está adquiriendo una inercia propia que lo lleve a un incremento más alto en los próximos meses”, cerró Pegoraro.