Desde la policía sólo nos dijeron que iban a tomarse una semana para completar los informes y análisis pero a mi hija no le preguntaron nada todavía, seguimos esperando y por eso salimos a la calle, a protestar frente a la comisaría anoche (jueves frente a la seccional Sexta) y hoy acá en la plaza vinimos a que alguien nos escuche, porque mi hija no miente”.
La madre (33) que denunció el rapto, golpiza y violación a su hija de 17 años entre la noche del lunes y madrugada del martes en el barrio Yacyretá de esta capital, ayer se manifestó en la plaza 9 de Julio para solicitar ayuda, información y que su voz sea respetada porque representa a la de una menor de edad víctima de un grave episodio contra su integridad sexual.
Sobre la investigación que inició en el Juzgado Correccional y de Menores 2, titular César Raúl Jiménez, la progenitora remarcó: “Hasta hoy (por ayer) no sabíamos qué juez tenía la causa, por los medios nos enteramos de las cosas, pero nadie nos avisa nada. Recién ahora sé que es un juez de menores el que va a investigar pero a nosotros la policía no nos informó nada y en las redes sociales circulan muchas cosas que no son ciertas y eso nos está dañando mucho, estamos desesperados”.
También resaltó: “Somos trabajadores, hay una familia que está sufriendo. Mi hija no recibió ninguna contención hasta el momento, estuvo doce horas en el Hospital Madariaga y después ninguna asistencia más. Ella está mal, no puede dormir y comer y yo no acuso a nadie, quiero que esto se esclarezca y que no la acusen de mentirosa”.
Ayer el juez mencionado notificó a los padres de un menor de 17 años que deberán acompañarlo el próximo lunes al juzgado de la avenida Centenario casi Santa Catalina para que se le tome su testimonio y pueda responder las consultas pertinentes.
De acuerdo a lo pocos datos que la víctima shockeada pudo brindarle a su familia, para que se concrete la denuncia el martes por la mañana ante la comisaría Sexta, la adolescente refirió que fue atacada por cinco jóvenes, de los cuales pudo identificar a uno por un tatuaje en una pierna y que se trataba de un exnovio de su misma edad.
Para el martes 15 de febrero, el juez Jiménez citó a la víctima y a su madre para que la menor pueda declarar en Cámara Gesell.
Ayer cerca del mediodía, después de su paso por la plaza 9 de Julio, la madre se presentó en el Juzgado y fue recibida por un secretario de Jiménez, quien le adelantó las medidas tomadas, entre ellas el arresto domiciliario del sospechoso y el pedido al Cuerpo Médico Forense para que informe sobre los estudios practicados en la menor en el Hospital Madariaga.
En cuanto a la declaración del adolescente apuntado, vale remarcar que es sujeto de imputación por su edad y ante la gravedad del delito que se lo investiga.
En cuanto a lo sucedido, hasta el momento en la denuncia se sostiene que una adolescente de 17 años fue hallada el martes a las 6, caminando desesperada rumbo a su domicilio luego de haber sido sometida durante once horas a la privación de su libertad y abusos sexuales múltiples en una vivienda cercana al cementerio posadeño.
De inmediato investigadores y peritos de distintas direcciones de la Policía provincial iniciaron la pesquisa para esclarecer el rapto, golpiza y ultraje presuntamente cometido por cinco varones de los que sólo habría identificado a uno.
Los cuatro restantes habrían cometido los delitos mencionados con los rostros cubiertos y luego de haberla drogado y golpeado para que no pudiera defenderse. Esto se habría iniciado a las 19.30 del lunes, cuando la menor se dirigía a su casa tras haber estado junto a su madre en su lugar de trabajo en la misma zona Oeste.
A pocos metros de la Escuela 53 en el cruce de las avenidas Almirante Brown y Zapiola, consta en la denuncia, fue interceptada y forzada a subir a un automóvil que la trasladó hasta una construcción abandonada donde se concretó el abuso sexual.
También intervinieron peritos del Cuerpo Médico Forense de la Justicia para las muestras o rastros biológicos que puedan aportar un patrón genético de los involucrados. Para ampliar esta pericia, se secuestró la vestimenta de la víctima.
En la presentación policial fue identificado el menor que la víctima aseguró participó del rapto y abuso. Fue ubicado pocas horas después en la zona Oeste de Posadas y quedó bajo resguardo de sus padres con detención domiciliaria ordenada por el juez Jiménez, tal como lo publicó este Diario.