Comenzó a regir el Pase Sanitario en los comercios y ya aparecieron los grupos antivacunas no sólo desafiando a la ciencia, sino también amenazando a los comerciantes que aplicaron una normativa nacional.
Estas diferencias entre quienes deciden inmunizarse para evitar caer en grave estado en las salas de terapia intensiva de los centros asistenciales -tanto públicos como privados-; y quienes no aceptan a la vacunación como una herramienta, generaron inconvenientes para algunos trabajadores que quisieron hacer cumplir esta exigencia.
El presidente de la Cámara Metropolitana de Turismo Comercio y Servicios de Misiones y tesorero de la Asociación Misionera de Hoteles, Bares, Restaurantes y Afines (AMHBRA), Martín Oria aseguró, al revelar el mal momento que les tocó vivir a sus colegas que “si bien estos siempre son los menos, son los que más brillan porque se quejan en las redes sociales”.
A su vez, Gustavo Alvarenga, presidente de AMHBRA, no dudó en asegurar que lo importante es vacunarse.
Las altas cifras de contagios que se vienen dando en los últimos días en Misiones, contrastado con la ocupación de camas COVID que tienen los hospitales, muestra la efectividad que tienen las vacunas ante el recrudecimiento de la tercera ola.
Es por esos trabajadores de la Salud que pasaron casi dos años sin descanso, algunos de ellos dejando su vida por salvar a quienes se contagiaron con coronavirus, en los que se debe pensar. Además de buscar evitar de todas las maneras posibles la ocupación total de las camas en las unidades críticas, para que nadie se quede sin atención médica cualquiera sea su enfermedad o dolencia.
Hay quienes sólo piensan en sus derechos, sin ver que afectan a miles de personas que podrían terminar en una terapia intensiva. Por oponerse a la ciencia que buscó de una manera extraordinaria, paliar una pandemia que ya se llevó 117.245 vidas en poco tiempo en la Argentina.