No caben dudas de que la biodiversidad, la masa verde y las reservas de agua dulce están entre los principales tesoros de la provincia. En un mundo que demanda mejores condiciones ambientales, contar con esos recursos determina el presente de Misiones y asegura su futuro en un sistema internacional que se proyecta cuanto menos caótico.
Pero contar con esos recursos no asegura que estén ahí para siempre. La gestión de los mismos depende en buena medida de articular acciones que aseguren su existencia a lo largo de los años.
Por ello, en tiempos como los actuales, cuando escasean las lluvias y los cursos de agua decaen, depende de todos que la masa verde siga estando ahí al igual que la biodiversidad.
Por estas horas la Secretaría de Ordenamiento Territorial del Ministerio de Ecología dio a conocer el resultado de los estudios realizados que determinaron la evolución de los focos de incendios desde 2015 hasta fin del 2020. El resultado es alarmante pues se puede observar un crecimiento que orilla el 150%. Entre las causas principales de este fenómeno figura la utilización del “rozado”.
Reducir los riesgos para proyectar el futuro de las riquezas naturales misioneras es una tarea que inmiscuye al Estado y a todos en pos de asegurar un futuro para nuestros hijos.