Mientras las universidades del país permanecen en alerta por una posible reducción presupuestaria para el 2022, otras ya están en una situación complicada. La Universidad Nacional del Alto Uruguay ha tenido que valerse de sus recursos para asegurar el funcionamiento académico durante los últimos dos años. Durante la pandemia, también recibió menos presupuesto del solicitado y el que le corresponde por ley.
Al respecto, el rector de la UNAU, Magno Ibáñez, contó en FM 89.3 Santa María de las Misiones que “todas las universidades que tienen menos de 10 años de funcionamiento tienen un aporte que se llama Proyecto para Universidades Nuevas. En los dos últimos años no nos han transferido”.
En materia de inversión, precisó que “son unos seis millones de pesos cada año que para nosotros es importante”.
En cuanto a su administración, indicó que se esperaba para “implementar aulas virtuales, necesitamos de aulas de informática, además de personal y recurso humano que debemos cumplirlo”.
Más allá de ese aporte, Ibáñez aseguró que “en este 2021, de un presupuesto de 200 millones nos dieron 70. En conclusión, usamos los ahorros que teníamos. De la infraestructura concretada hemos pedido cero pesos a Nación. Hemos usado todos los recursos de ahorro y estamos quedando prácticamente sin nada”.
Para las universidades “hay una ley de educación Superior, donde aseguran que el 70% de los docentes deben estar por concurso, regulares, no contratados ni interinos. Al ser una universidad nueva y prácticamente todos los meses hacemos llamados a concursos. Esto implica costos en el tribunal y luego tener para pagar esos sueldos netos, aportes del AFIP”, explicó.
Al no recibir la partida presupuestaria suficiente, el rector de la UNAU remarcó que “se nos complica cumplir con la Ley”. Por lo tanto, “tenemos que hacer contratos, lo cual es algo irregular. Llegamos a negrear para tener trabajadores en la institución”.
Más allá de ser una universidad nacional nueva en la provincia, está cerca de tener sus primeros egresados y cada vez tiene más estudiantes. “Tenemos hoy cerca de 160 docentes, pero pronto debemos incorporar nuevos porque avanzamos en carreras que no tienen aún sus docentes”, añadió.
A diferencia de otras casas de estudios universitarias, Ibáñez recordó que “otras ya están en funcionamiento y en nuestro caso todo debemos poner en marcha. Vamos a llegar al cuarto año, con los primeros egresados este año, con lo cual requerimos docentes para los últimos años de las licenciaturas, como Kinesiología, Administración de Negocios. Eso implica docentes y al área administrativa para su acompañamiento”.
Con las modificaciones pautadas en el distanciamiento en las aulas, compartió que para el 2022, “por cómo van las cosas, vamos a tener una presencialidad plena y para ello necesitamos bedeles, personal de maestranza y de todo tipo. Esto requiere recursos y es algo que influye directamente en los alumnos”.